La Croacia de Hezonja pasa por encima de un Doncic muy solo
El alero celebra su renovación con el Madrid con una buena actuación y un gran triunfo frente a Eslovenia. Triple-doble del croata Dario Saric y de Doncic.
La Croacia de Mario Hezonja, que celebró con una gran victoria el anuncio oficial de su renovación por cinco temporadas con el Real Madrid (hasta 2029), superó de forma incontestable y centenaria a la Eslovenia de Luka Doncic (92-108) en el estreno del durísimo Preolímpico que se celebra en El Pireo, donde el anfitrión, Grecia, y la República Dominicana aspiran también a lograr la clasificación para los Juegos. Supermario sumó 12 puntos, 6 rebotes, 8 asistencias y 3 recuperaciones para un +23 con él en pista, el mayor de su selección. Su compañero Dario Saric completó un triple-doble, eso tan difícil de alcanzar en el baloncesto FIBA: 19+10+10. Demoledor, como el pívot de 2,13 Ivica Zubac, que en solo 18 minutos en cancha hizo 18 tantos, 8 rechaces y 5 pases de canastas con una sensación de superioridad abrumadora. Y triple-doble estéril de Doncic con 26+11+10.
Un gran duelo para la primera jornada de este Preolímpico, importante aunque no definitivo. Si algún partido podía perder Eslovenia, era este. En adelante jugará sin red. Tiene que ganarlo todo. A Nueva Zelanda el jueves y, si no hay un triple empate inesperado que la deje fuera, las semifinales (en principio, Grecia o República Dominicana) y la final. Solo así logrará el billete a los Juegos de París 2024 tres años después de disputar las semifinales en la cita de Tokio. Las sensaciones, eso sí, fueron malísimas y el sueño olímpico parece lejano.
Croacia se impuso de principio a fin a una Eslovenia en la que la elevada cadencia encestadora de Doncic resultó insuficiente. Llevaba 16 puntos en sus primeros 17 minutos en cancha, 22 en 26 y, al final, 26 en 37 minutos, pero sin triples (0 de 9) y un pobre 8 de 23 en tiros de campo. Sus compañeros no le arropaban, no conseguía involucrarlos más allá de algún acierto de Klemen Prepelic (19 tantos) y de un Vlatko Cancar (12) que forzaba faltas. El nacionalizado Josh Nebo estaba muy lejos de ser un factor en el juego interior frente a un rival superior en físico y talento colectivo.
Un trío superior: Saric, Zubac y Hezonja
La puesta en escena de los NBA Saric y Zubac marcó la diferencia. Luego se les sumó Hezonja, que apenas descansó (35:50 en cancha). Gran tercer cuarto. Zubac, en concreto, hacía lo que quería bajo el aro con canastas sencillas por tamaño y calidad (14 puntos en sus primeros 14 minutos) y también repartía juego al poste (4 asistencias en la primera parte). La única incertidumbre venía dada por su tercera personal antes del descanso. Saric acabó ocupando hasta el intermedio su lugar y la cosa no dejó de funcionar (13+9+3 en los dos primeros cuartos del que ha sido jugador de los Warriors). Zubac metió la primera de la reanudación y poco después se fue al banco a guardar fuerzas para lo que se avecina. En su lugar, presencia para Danko Brankovic, del Bayern de Múnich (15 puntos sin fallo, 7 de 7 de dos).
Largo parón y los dos equipos calentaron en la misma canasta
Los croatas, dirigidos por el exjugador Josip Sesar, movían bien el balón, realizaban un buen juego de pase y apilaban 25 asistencias en el minuto 27, cuando llegó el parón por un fallo en el reloj de posesión situado encima de una de las canastas (concluyeron con 34 pases frente a la pasividad defensiva del rival). Una interrupción demasiado larga, que rondó la media hora y que dejó a todos fríos, aunque para entonces Croacia había alcanzado una renta de 21: 60-81 a falta de 12:37. Doncic veía pasar el tiempo subido en una bicicleta estática de calentamiento mientras que croatas y eslovenos compartían rueda de calentamiento en la misma canasta, la única disponible, en una imagen inédita.
El duelo se reemprendió a las 22:43 de este martes con un triple del base croata Goran Filipovic (61-84), que completó igualmente una gran actuación (21 y 6 asistencias), como el escolta nacionalizado Jaleen Smith (11). Nada modificó la dinámica de los últimos minutos. Croacia mantuvo el ritmo alto de anotación y Eslovenia careció de argumentos para modificarlo. Si los croatas vencen este miércoles a Nueva Zelanda serán primeros y cruzarán con el segundo del otro grupo (Grecia, República Dominicana y Egipto). Doncic se la jugará el jueves frente a los neozelandeses. La batalla por llegar a París: solo uno lo logrará.
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