Aguilar: “Habrá acuerdo para la renovación de Scariolo”

Apenas lleva cuatro meses y medio en el cargo, pero Elisa Aguilar (15-10-1976) no ha aterrizado en cualquier sitio. La presidenta se conocía cada rincón de la Federación Española de Baloncesto (FEB). Ahora la mira desde otro prisma y ha aumentado responsabilidades, pero sabe por dónde pisa y no esquiva ningún asunto que se le plantea en la entrevista: la renovación de Scariolo, la presencia de Lorenzo en el Preolímpico o su deseo de volver a ser presidenta, que podría cristalizar en las elecciones de mayo, a las que piensa presentarse. “Estoy disfrutando del cargo”, dice a AS en el hotel Petronila de Zaragoza.

Empecemos por lo último, Ricky. ¿Cuándo se entera de que vuelve, qué supone para la FEB su regreso?

La FEB ha estado cerca de Ricky desde el primer momento. Primero, poniendo a su disposición todas las herramientas que necesitase. Una vez que salí presidenta, quise saber a través de mensajes cómo iba. Al final, tienes gente que te puede ir comentando y vimos que la evolución estaba siendo positiva. Que nos confirmase que quería volver, estar en la Ventana, e iniciar la nueva etapa después de recuperarse es la mejor noticia que nos podían dar. Primero, porque esté recuperado, que es lo primordial y lo importante. Que todavía el baloncesto y la camiseta de la Selección sean una motivación. Y más allá del baloncesto, hay un mensaje importante en la valentía de Ricky. Primero, en decir: “tengo que parar porque no estoy bien”. Y luego, volver recuperado. Es un mensaje que dice de él. Los deportistas son personas, tienen procesos, mejores y peores épocas, y Ricky ha sido valiente y está recuperado y de vuelta.

¿Lo esperaba tan pronto? Scariolo sí dijo que “habrá un momento en el que Ricky va a querer volver”, pero durante una época hubo poca información.

Sabía que la decisión era suya y que cuando él se encontrase bien, volvería. Si no hubiese vuelto a las pistas, la FEB estaría eternamente agradecida por todo lo que nos ha dado y porque es parte de nuestra familia. Eso sí, estamos encantados de que vuelva. Que lo hiciera tan pronto, no lo sabía. Porque eso formaba parte de un proceso suyo.

¿Cómo lo han visto?

Bien. Con esa sonrisa típica de Ricky, de que está disfrutando. Sabe que aquí está arropado, con un cariño total. Y el hecho de que viese la grada llena y Zaragoza le demostrase todo el cariño, es la mejor demostración de cuánto se le quiere.

Es su primera Ventana como presidenta de la FEB con la Selección absoluta masculina. Una concentración, además, con pesos pesados. ¿Cómo se ha presentado a los jugadores?

Pues todo ha sido muy natural y normal. Llevo muchos años metida también en la Selección. Quise tener una reunión con los jugadores de apenas cinco minutos en la que quise transmitirles que la Selección masculina, lógicamente, es clave para la FEB. Que son referentes de nuestro deporte y que estamos para ayudarles y ponerles las mejores condiciones. Vamos a estar cerca de ellos como siempre ha estado la FEB. Quiero poner en valor que Rudy haya querido ponerse al frente en esta Ventana que es de clasificación para un Eurobasket que ya no va a jugar porque se retira de la Selección después de los Juegos. Eso es lo que hace legado y es lo que queremos potenciar si cabe, el sentimiento de pertenencia. Están aquí también los Golden Boys 2.0 empapándose un poco de esa manera de vivir y de ver que los referentes tienen ganas. Es lo que quise ponerle en palabras a los jugadores. También las ideas que tenemos.

¿Cómo cuáles?

Pues crecer en el número de licencias. Ellos que son referentes son la mejor ayuda. Vamos a poner en marcha también el Club España en las próximas fechas… Unas pinceladas sobre las líneas estratégicas que queremos seguir. En mi hoja de ruta también estaba que se jugase el Preolímpico en Valencia, que lo hicieran en las mejores condiciones, sin tener que hacer viajes, con la afición española al lado. Es un buen escenario, que ojalá permita que Rudy sea el primer jugador de la historia del baloncesto en participar en seis Juegos Olímpicos.

¿Tenía cierto reparo por ver cómo la recibían? La FEB viene de la presidencia de Jorge Garbajosa, que había sido compañero de muchos de ellos.

No he visto ningún miedo, total naturalidad. Al final, todos hemos sido jugadores. Hemos estado en las canchas, nos conocemos. A los veteranos hace más tiempo, también con los Hernangómez, Brizuela o Alberto llevo muchos años conviviendo, y me han recibido con total normalidad y con los brazos abiertos. Ese era un poco también el objetivo de la reunión. Que vean la sintonía. Estoy encantada con el mejor equipo que puedo tener.

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¿Qué va a pasar con Scariolo?

Lo dije desde el primer día. La prioridad es que Sergio sea el seleccionador los próximos cuatro años. No sólo en su condición de seleccionador, sino la línea que marca con los jóvenes a nivel de formación. Él sabe cuál es nuestra intención y también sé que la FEB para él es muy importante. Ahora es más una cuestión de tiempos, de darle toda naturalidad. Estoy convencida de que al final vamos a llegar a buen puerto y habrá acuerdo con Scariolo.

¿Le gustaría que la renovación se anunciase antes del Preolímpico? Hay unas elecciones y es de imaginar que también querrán manejar unos tiempos.

Está claro que si él no quisiera estar, ya lo sabríamos perfectamente porque Sergio sabe que esta es su familia, lleva muchos años y en ningún caso va a perjudicar a la FEB con su decisión. Si él no quisiera estar, ya nos lo habría transmitido. No hay un plazo para la renovación. La prioridad ahora es la Ventana. Estamos hablando con él y estoy convencida de que no a mucho tardar, podremos decir algo.

¿Va a venir Lorenzo al Preolímpico, la presencia de Ricky puede variar sus intenciones?

La comunicación que tenemos con Lorenzo, y que tengo particularmente con él, que incluye que nos pusiéramos a su servicio cuando explotó el conflicto en Israel y Gaza, ha sido periódica. Cuando vino el Maccabi a jugar a Madrid, me tomé un café con él y la predisposición de Lorenzo es, al cien por cien, estar en el Preolímpico en Valencia.

O sea, que está in para Valencia,

Así me lo transmitió él.

¿Qué FEB ha encontrado? Lleva cuatro meses y medio en el cargo ya. Formaba parte de la organización, pero ahora la ve desde otro prisma.

Me encontré una Federación con una reputación y una imagen muy buena, que a nivel deportivo ha trabajado muy bien en la formación y en el baloncesto sénior. Cuando cojo la presidencia, lo que quiero es mejorar las cosas que estaban muy bien hechas; y, en otra línea, poner en marcha nuevos proyectos. La primera idea que puse encima de la mesa, y así lo manifesté en la Asamblea el día 2 de octubre, era crecer en licencias. Somos el primer equipo en licencias femeninas y el segundo en masculinas después del fútbol. Dije que en seis años teníamos que llegar a 500.000. Estábamos en 377.108 en 2022. Y tenemos la buena noticia de que hemos crecido un 9%. Estamos por encima de la mejor cifra, que fue en 2012. Hemos alcanzado las 411.885 y eso sí que es una prioridad. También hemos entablado relaciones con instituciones educativas. Queremos ir de la mano de las Federaciones Autonómicas para que el baloncesto esté en todo patio de colegio. Esa era una idea prioritaria. Y más.

Diga.

Queremos avanzar en el sentimiento de pertenencia, ya que ahora jugadores y jugadoras en edades más tempranas, cuando van a iniciar la etapa universitaria, muchos de ellos se van a Estados Unidos. En las próximas fechas se presentará el Club España. Vamos a ser la primera federación que tiene un club de socios de las Selecciones absolutas para fidelizarles y beneficiarse de acuerdos que tenemos: camisetas, entradas. Y luego estará el Team la Familia, para los jugadores que pasen por nuestras selecciones. Que estén aquí los Golden Boys 2.0 es un ejemplo de esto. Van a estar las Golden Girls 2.0, que pondremos en marcha este verano. Y luego está la línea estratégica del 3x3, también fundamental para nosotros en el crecimiento de licencias, captación de recursos…Con las chicas, además, tenemos un Preolímpico en Hungría; y puede que los chicos también se metan si se dan ciertas circunstancias. Se podría dar el escenario de que estemos con cuatro selecciones en los Juegos…

Cuando uno llega a un cargo así, y la selección masculina es la número dos del mundo y la femenina, la cuatro, se ganan tantas medallas en las inferiores, ¿el plan es no tocar nada para no estropearlo o usted quiere darle su toque?

Cualquier persona que adquiere una responsabilidad como la que yo he tomado, quiere mejorar lo que hay y poner su toque. Eso es evidente. Estamos en un buen momento deportivo, pero queremos más. Somos ambiciosos, sabiendo que esto es deporte. Pero si algo nos caracteriza es competir, no bajar los brazos. Son valores que van con esta camiseta. Lo que queremos desde la presidencia es continuar mejorando el baloncesto español. Nuestra Liga femenina es la mejor de Europa, algo bueno para las jugadoras de formación. Los chicos tienen la ACB, la LEB Oro. Lo importantes es que haya competiciones para que los jugadores se vayan formando. Y si luego quieren salir, porque eso es una opción real, que cuando se acabe su etapa formativa o de la NBA, vuelvan a España porque sea la mejor opción que tienen encima de la mesa.

El primer desafío que tenía era que la Selección femenina estuviera en los Juegos. ¿Hasta qué punto le ha dado paz que en los Juegos ya haya, con seguridad, una selección absoluta?

Lo primordial son ellas. Estar en una cita olímpica no lo puede vivir todo el mundo. Es especial y recompensa su trabajo. Luego, a nivel de FEB, da tranquilidad por el esfuerzo que estamos haciendo con los clubes, los entrenadores y las jugadoras para que nuestra liga sea potente. Que esté en París la Selección refrenda el esfuerzo. A nivel personal, lo pasé mal porque sufrí en Sopron. Era un Preolímpico engañoso porque es verdad que se clasificaban tres de cuatro, pero estaban la plata olímpica, la cuarta del mundo y la cuarta del Eurobasket, que además era anfitriona.

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Por motivos obvios, conoce muy bien la Selección femenina. En Tokio no salieron las cosas, explotó el caso Mondelo, vinieron años de vacío. ¿Está completado el proceso de renovación en la selección femenina?

Los ciclos olímpicos suelen llevar siempre despedidas de jugadoras. La elección de Miguel (Méndez) como seleccionador fue un acierto. Era muy conocedor también de las categorías inferiores porque había sido seleccionador nuestro en la U20, la U18. Las conoce bien y estamos en el punto de tener un equipo que combina veteranas, media edad y las jóvenes. Y juntamos voluntades. Es normal que después de la cita olímpica se retire alguna. No sé si va a pasar, pero podría ser. Y trabajando como trabajamos, el relevo será natural y esperemos que no lo suframos en años próximos.

¿Megan Gustafson les ha dado lo que esperaba?

Se ha acoplado muy bien. Cuando el área deportiva ve que hay una oportunidad y se decide acometer su nacionalización, es cierto que nos venía bien. Una pívot, alta, con buena envergadura, reboteadora y joven. Con ganas de querer jugar. En su primer torneo nos ha ayudado mucho a estar en París y, aparte de lo deportivo, se ha acoplado bien a un equipo que la ha recibido con los brazos abiertos porque tiene ese carácter y además sabe que nos hace mejores.

El 2 de mayo hay elecciones. ¿Espera ser presidenta cuatro años más y que le permitan casi empezar su proyecto, ya que sólo lleva cuatro meses y medio? ¿Cree que habrá rivales por el camino?

Cuando me presenté para las elecciones del 2 de octubre, mi intención ya era volverme a presentar para estas porque necesitas cuatro años como mínimo para poner en marcha las ideas que tienes. Estoy ilusionada, con ganas. Sigo sintiendo el respaldo del baloncesto español. ¿Si se va a presentar alguien? Esto es un proceso democrático y se puede presentar quien lo considere. Y si se presenta alguien, lucharé porque quiero ser presidenta de la FEB muchos años.

Este verano, los cuatro vicepresidentes le mostraron su respaldo. No parece que haya cambiado nada…

Es cierto que tengo el apoyo de mis vicepresidentes. Y tengo una buena relación con Antonio Martín (ACB), Alfonso Reyes, los entrenadores, el estamento arbitral… Me gustaría ser presidenta porque tengo ganas, retos importantes e ideas que van a potenciar mi deporte que es el baloncesto.

En los últimos años, España ha organizado un Mundial y un Eurobasket femenino, Mundiales de categorías inferiores. Pero desde 2014 no organiza ningún campeonato absoluto masculino. ¿Entra en su plan organizar un evento de estas características?

Albergar el Preolímpico ya es mucho, un premio grande, porque es uno de los torneos de más nivel deportivo. Me lo planteo, sí. Sería un orgullo traer un Eurobasket y un Mundial, pero sabemos que no es fácil porque hay competencia y a nivel económico exige una inversión potente. Pero las instituciones de este país nos están demostrando interés en organización de eventos y esto es una buena señal para que en el futuro podamos organizar algún evento más relevante.

¿Cómo se imagina el Preolímpico de Valencia? Las últimas veces que España ha organizado eventos no ha terminado de ir bien; y en los Preolímpicos en general las selecciones locales también han sufrido.

Es verdad que la historia no nos acompaña, porque todos los países que han organizado Preolímpicos se han quedado fuera, pero nos gustan esos retos, romper estadísticas. Creo que lo vamos a gestionar bien. Tenemos un gran equipo técnico que sabe que hay que ir con calma, partido a partido, y vamos a tener a la afición con nosotros. Me lo tomo con mucha naturalidad. Creo que va a ser un torneo difícil, pero somos España y ganarnos a nosotros no va a ser fácil. La camiseta pesa y los rivales nos tienen este reconocimiento porque nos lo hemos ganado.

¿Cuándo decidieron que irían a por el Preolímpico?

En Yakarta tuvimos claro que había que apostar, pero fue al volver, cuando hablamos con las instituciones, les pusimos sobre la mesa la idea y vimos la apuesta al cien por cien de la Generalitat valenciana cuando se puso en marcha.

La última también podría ser la primera. ¿Le gusta ser presidenta?

Pues la verdad es que me gusta, no le voy a engañar. Me gusta trabajar con mi equipo directivo y vivir mi deporte. Mucha gente me dice que no es muy normal…, pero yo lo estoy disfrutando.