Buenavida: “Se me cae la baba con Awa Fam”

Elena Buenavida (Santa Cruz de Tenerife, 2004) es una de las grandes perlas del baloncesto español. La base (19 años y 1,74 metros) ha debutado esta temporada con el Valencia Basket: 17 partidos en la Euroliga y 26 encuentros en una Liga Femenina Endesa que las taronjas conquistaron tras derrotar al Perfumerías Avenida en la final. Un título más para esta canaria que ya se ha colgado en el cuello tres medallas europeas con las categorías de formación: oro con la Sub-20 y plata con la Sub-18 en 2022, y un bronce con la Sub-16 en 2019.

Ahora, le llega el turno de liderar a la Sub-19 en este Mundial, que se celebra en Madrid del sábado 15 al domingo 23 de julio: la primera fase y los octavos se disputarán entre el Complejo Deportivo Espartales de Alcalá de Henares y el Pabellón Jorge Garbajosa de Torrejón de Ardoz. La fase final (cuartos, semifinal y final) será en el WiZink Center de la Comunidad de Madrid. “Mete un poco de presión que sea aquí”, asegura a AS Buenavida, que también ha triunfado en el 3x3 con un oro europeo y una plata mundial con la Sub-19 hace dos años: “Me gusta mucho. Verlo, vivirlo, pero yo me quiero dedicar al 5x5 la verdad”, continúa la base de un equipo que se medirá en la fase de grupos con Australia (sábado 15, a las 20:15), Francia (domingo 16, a las 20:15) y Argentina (martes 18, a las 20:45). Los dos primeros se jugarán en Alcalá de Henares, mientras que el tercero, en Torrejón de Ardoz.

¿Cómo afrontan este Mundial?

Con mucha, mucha ilusión, no le voy a mentir. Sabemos lo que se nos viene encima, que no va a ser nada fácil. Pero con muchas ganas.

El grupo tiene pinta de ser duro con Argentina, Australia y Francia…

Sí, sí. Bastante. Tuvimos una primera toma de contacto con este Mundial bastante fuerte en el torneo de Alcalá de Henares en el que jugamos contra Australia, Estados Unidos y Canadá. Nosotras vamos con la cabeza asentada: ir poquito a poco, afrontando lo que se nos venga con la mayor ilusión y las ganas posibles, pero desde el esfuerzo y la unión del equipo.

Y, usted, ¿cómo está en la previa del torneo?

Bien. Muy ilusionada. Hacía tanto tiempo que no estaba un mes entero con mi generación que lo echaba de menos porque siempre he tenido la suerte de ir de un lado para otro. Me gusta esta generación, este equipo, este staff. Me siento muy cómoda dentro de él. Y con muchas ganas de disfrutar del Mundial.

Si le pregunta alguien que no las conoce: ¿a qué compañera recomendaría que siguiera durante este campeonato?

Sinceramente, Awa Fam. Es un espectáculo. Es pieza fundamental en este equipo. Da gusto verla, da gusto como se mueve, da gusto como con dos años menos domina el juego constantemente. Lo siento, pero a mí se me cae la baba con mi compañera.

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FIBA la ha colocado entre las 20 jugadoras a seguir en este torneo. Es un motivo de orgullo supongo, ¿no?

Sí, pero también de responsabilidad. Estoy al frente de este equipo y tengo que dar la cara tanto en lo personal como en lo colectivo. Es un orgullo porque a todo el mundo le gusta que la tengan presente, pero también es un motivo para asentar la cabeza y decir ‘yo quiero hacerlo bien, pero quiero que el equipo gane, que cumpla sus objetivos’. Eso está por encima de logros individuales.

Le llega el Mundial tras tu primera temporada con las ‘mayores’ en el Valencia. Euroliga, Liga… ¿Ha sido duro o divertido?

Un mix se podría decir. He tenido la suerte de vivir este año, que ha sido increíble. Personalmente, creo que he dado un paso hacia adelante brutal. Espero que todo lo que he aprendido durante la temporada sea capaz de verse reflejado tanto en mí como en mi equipo durante este Mundial.

Imagino que ese título de Liga sabría a gloria…

Fue la gota que colmó el vaso. Supercontentas de que después de tres años este fuera el definitivo y yo ser un poco partícipe del equipo. Me hizo superfeliz por mis compañeras y por el equipo.

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¿Cómo es compartir un vestuario con jugadoras como Alba Torrens, Raquel Carrera, Queralt Casas…?

Brutal. Me sentí superafortunada. Me acogieron desde el primer momento muy bien. Son las tías que más saben de baloncesto y te acogen de esa manera, con esas ganas de hacerte partícipe de algo… Fue un orgullo muy grande y les estaré superagradecidas toda la vida.

Sus compañeras han conquistado la plata en el Eurobasket. Va a tener, al menos, que igualar eso para que no le echen la bronca la próxima temporada…

¡Lo intentaré! Ya les he dicho que si vienen a verme alguna sorpresita se llevarán.

¿Algún consejo que le hayan dado y que usted recuerde?

En general, todas me dicen que disfrute mucho, que estos ciclos de formación con España los viven muy pocas personas. Que aprenda lo máximo posible y que no me deje nada por dar.

¿Hay en alguna que se fije más que en otra dentro de ese vestuario lleno de jugonas?

Alba Torrens, obviamente. Me fijo porque para mí será el referente español más grande que ha tenido el baloncesto español en muchísimo tiempo y por su manera de ser fuera de la pista. Es encantadora. Es como mi madre, básicamente. Si lo escucha me va a matar (ríe). Y de las que se acerquen un poco más a mi círculo social, Raquel Carrera. Con 21 años, lo que está haciendo… Creo que es digno de admirar y es asombroso. Esto muy contenta porque es mi amiga y quiero que consiga todo lo que se proponga porque tiene talento para ello. Soy su medio fan, por así decirlo.

Tuvo la opción de irse a Estados Unidos, pero decidió fichar por el Valencia. ¿Cuál fue el motivo?

En Estados Unidos tienen una forma de juego muy diferente, mucho más físico. Aquí el juego me gusta mucho más. Sinceramente, me lo planté bastante. Me gustaba la opción de probar ese estilo, de salir de mi zona de confort. Me gustaría ir porque no quiero quedarme con la sensación de, en un futuro, arrepentirme por no haberlo hecho. Pero, sinceramente, quedarme y estar en Valencia es de las mejores decisiones que he tomado en lo que llevo de carrera.