El Movistar Estudiantes vuela: 12 triunfos seguidos

El inicio de diciembre fue un dolor de muelas para el Movistar Estudiantes. Victorias sufridas (e incluso agónicas) ante el Oviedo, el Ourense y el Morón. Triunfos agridulces, por lo que costaron y por la imagen: el equipo era endeble. Un flan que salvaban actuaciones inconmensurables de Jayson Granger. También algo de Francis Alonso. Pero ese horrible bache de juego ha quedado atrás.

La buena actuación en el Vicente Trueba ante el Grupo Alega Cantabria (75-92) la ha enterrado definitivamente. La superioridad colegial fue palmaria, por delante en el marcador desde el primer minuto, con la máxima en el +20 (72-92) y la capacidad de parar los arreones rivales. Si los de Torrelavega amagaban con entrar en el enfrentamiento, la reacción era inmediata con Granger de policía de tráfico en dos ocasiones. El base se disparó hasta los 20 puntos con un 4 de 6 en triples (algunos estratosféricos), los 6 rebotes, las 7 asistencias y los 4 robos para 33 de valoración. Mus Barro disfrutó su conexión con el uruguayo hasta llegar a los 16 tantos.

Aunque la mejor noticia fue la vuelta a la vida de Devin Schmidt con 16 puntos y la impecable labor defensiva de todo el grupo. Cambios con ayudas veloces que dejaron sin aliento a los cántabros, que vivieron de las explosiones de Littleson (17) y Germán Martínez (13). Bulic estuvo sobrio con 12 tantos y 12 rebotes. El trío mantuvo vivo a los locales cuando los madrileños amagaban con destrozar el duelo ya en el segundo cuarto: a 3:11 del descanso, +16 (28-44) tras un triple de Granger. Achicando agua, el Grupo Alega dejó el marcador en un 38-49 antes del tercer cuarto más manejable. Las solo dos pérdidas colegiales (ambas en el último minuto y medio) les permitía dirigir el duelo.

Con la vuelta de vestuarios, el Cantabria asusto. Parcial de 9-0 alentado por una zona 2-3 y varias pérdidas tontas del Estu. El 49-55 puso a Garino y Granger de nuevo en pista… y hachazo. 4-14 de parcial con 7 puntos del uruguayo y un triple de Schmidt para el 53-69. El propio estadounidense elevó la renta hasta el +19 con solo 7:33 por jugar (59-78). Una nueva caraja estudiantil metió a los locales en el encuentro (70-80) con dos triples (Littleson y Rakocevic) y un 2+1 de Bercy.

¿Problemas? Granger a pista. En un abrir y cerrar de ojos, +20 (72-92) con 5 tantos del base y dos asistencias a Barro. Punto final y 14º triunfo en 15 jornadas para el Estudiantes, que ya espera la gran batalla contra el Sïlbo San Pablo Burgos del próximo domingo a las 12:30 en el Movistar Arena. Una batalla por el ascenso.

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