Mario López, investigado por agresión sexual a una menor

Mario López, exseleccionador en las categorías inferiores del baloncesto español y que hasta ahora era responsable de la gestión interna y deportiva del Lointek Gernika Bizkaia, equipo de la máxima categoría del baloncesto femenino español (Liga Femenina Endesa), está siendo investigado por una supuesta “agresión sexual continuada a una menor”. La noticia ha sido adelantada por Isabel Valdés, la corresponsal de género de El País.

Según esta información, la víctima tenía trece años cuando comenzaron los presuntos hechos que ahora han sido denunciados, en 1998. Entonces estudiaba y jugaba al baloncesto en el colegio Allende Salazar, donde la entrenaba Mario López, que también la dirigió en el Lointek Gernika, el equipo en el que ha pasado más de un cuarto de siglo un entrenador que también ha estado al frente de las Selecciones femeninas Sub-16, Sub-18 y Sub-19. Recientemente, y después de más de un año de baja, López había regresado al club con un nuevo cargo en los despachos.

Cuando tuvo conocimiento de la publicación de estas informaciones, el Lointek Gernika, con el que AS se puso en contacto para valorar su posición, anunció en un comunicado que se “desvinculado totalmente de la persona investigada” y aseguraba que esta era “la primera constancia” que tenía sobre esta gravísima situación: “El club en ningún momento hasta ahora ha tenido conocimiento oficialmente de ninguna investigación abierta”.

Los supuestos hechos van de la agresión sexual (“una penetración anal y felaciones incontables”) a presiones y amenazas. Mario López tenía entonces 31 años y han pasado 21 hasta que, en junio, se presentó una denuncia en los juzgados de Gernika. Esta se encuentra, siempre según El País, a la espera de auto de procesamiento. El club vizcaíno también asegura que Mario López se refirió a lo sucedido como un caso de acoso, pero no de agresión sexual.

Uno de los documentos incluidos en las diligencias habla de “atentados contra su libertad sexual, los cuales aumentaron en intensidad, incluyendo relaciones sexuales con penetración, tales como felaciones, así como masturbaciones, así como una relación sexual consistente en penetración por vía anal”. Dentro de “un contexto de superioridad del investigado respecto de la víctima por razón de edad y posición e incluyendo actos de violencia física”. Los escritos detallas las agresiones sexuales y hablan también de “presión, agresividad verbal, empujones, gritos…”.

La denunciante dejó el baloncesto en 2003. Mario López nunca lo hizo, solo temporalmente se fue del Lointek por lo que fue comunicado como “problemas de salud”. Su lugar en el banquillo lo ocupó Anna Montañana, una histórica del baloncesto español (129 veces internacional). Este relevo coincide básicamente con la línea temporada de la denuncia presentada contra Mario López. Después regresó, pero pasó después a los despachos y dejó su puesto, en esa ocasión, a Lucas Fernández. Este tomó las riendas del equipo en septiembre.

La Federación Española de baloncesto, por su parte, ya ha emitido un comunicado tras esta información aparecida en El País. En él, la FEB “condena sin paliativos” esos presuntos abusos sexuales. Este es el texto completo del comunciado:

Ante las informaciones publicadas hoy por el diario El País sobre unos presuntos abusos sexuales cometidos en el ámbito de nuestro deporte, la Federación Española de Baloncesto quiere manifestar su más enérgica condena. El compromiso de la FEB es la completa erradicación de este tipo de comportamientos, que considera inaceptables y contra los que cuenta con un Protocolo y una Delegada de Protección desde el año 2014. Las políticas de la Federación en este campo son muy activas y buscan incrementar los mecanismos de vigilancia para tratar de que no se produzca ninguna actuación de este tipo en el baloncesto español.

La FEB sólo tuvo un conocimiento parcial de este asunto a partir de una denuncia contra el club recibida el 29 de octubre de este mismo año. En esta denuncia se alude a que, presuntamente, hay un procedimiento judicial en marcha por unos presuntos abusos sexuales. A pesar de no tener ninguna notificación de cualquier tipo al respecto, inmediatamente la Federación incoó un expediente de investigación y lo notificó a la denunciante, al denunciado (el club), a la Federación Autonómica del País Vasco, al Consejo Superior de Deportes y a FIBA. En todo caso, y mientras se está substanciando el expediente, el Comité Asesor frente a la Violencia Sexual de la FEB dictó unas medidas cautelares que impiden la expedición de cualquier tipo de licencia al implicado en las competiciones organizadas por la Federación hasta que exista una sentencia firme sobre estos hechos. Asimismo, se ha dado traslado a FIBA para que estas medidas cautelares se extiendan con carácter internacional. Cabe señalar que, en la actualidad, esta persona no cuenta con una licencia federativa expedida por la FEB, ni tiene ningún otro vínculo profesional con la Federación.

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