El legado de Ferrándiz en Alicante: una calle, un pabellón y una cátedra
La ciudad natal del legendario técnico de baloncesto llora la pérdida de una de sus personas más ilustres.
Pedro Ferrándiz decidió hace años residir en Alicante. Tras dar la vuelta al mundo en varias ocasiones, siempre con el balón de baloncesto en la mente, el legendario entrenador del Real Madrid apostó por regresar a su ciudad natal. Sus paseos en chándal, por la mítica Explanada y por su barrio, eran habituales estos últimos años. Ferrándiz salía cada día a primera hora de la mañana para estar casi dos horas caminando. Luego, reflexionaba en su casa, en Virgen del Socorro, con unas vistas envidiables a la playa del Postiguet.
La leyenda de Ferrándiz se forjó lejos de Alicante, pero su ciudad siempre vivió con admiración cada barrera que fue derribando el técnico. Por eso, su pérdida es grande para la capital de la Costa Blanca. Ferrándiz, en vida, pudo recibir todos los homenajes posibles de su ciudad. Los reconocimientos llegaron tarde, pero llegaron. Al final, el legado que deja en Alicante es importante: una calle y un pabellón con su nombre. Además, Ferrándiz tiene el honor de tener una Cátedra de deportes en la Universidad de Alicante.
En marzo de 2017, Ferrándiz recibió uno de los homenajes que más ilusión le hizo. El legendario técnico pudo disfrutar del hecho histórico de tener una calle con su nombre, en la Playa de San Juan. “Este homenaje colma todos mis sueños como alicantino. Una calle es el reconocimiento de toda una ciudad y es más importante que tener un pabellón con mi nombre como ya tengo”, comentó Ferrándiz en su día.
En 2014, tres años antes de tener una calle con su nombre, el Centro de Tecnificación pasó a llamarse pabellón Pedro Ferrrándiz. La casa del Lucentum Alicante, el equipo más representativo de la ciudad, también fue la de Pedro. “Lo más grande para un deportista es que le reconozcan en su tierra. Tener un pabellón con tu nombre es a lo máximo a lo que uno puede aspirar”, comentó en enero de 2014. Sonia Castedo, alcaldesa de Alicante por entonces, admitió que la ciudad saldaba “una deuda importante con Ferrándiz”.
Al extécnico de baloncesto también le hizo mucha ilusión cuando, en 2015, la Universidad de Alicante creó la Cátedra del Deporte Pedro Ferrándiz. Una acción pionera que sirvió para atraer a grandes ilustres a la ciudad para impartir charlas, como Vicente del Bosque. Ferrándiz, como agradecimiento, donó su biblioteca personal. “Espero que algún día está Cátedra sea un referente nacional e internacional en investigación, divulgación y formación en materia deportiva”, comentó un Ferrándiz que en apenas tres años llenó sus vitrinas de homenajes.