El genio Shorts convierte al Telekom Bonn en el rey de la BCL de Málaga
Otro recital de T.J. Shorts (29 puntos) convierte al Telekom Bonn en campeón de la BCL. El Hapoel contó en el Carpena con el apoyo de 2.000 seguidores.
El Telekom Bonn, con el increíble Shorts (29 puntos y 15 de valoración) se proclamó campeón de la Basketball Champions League (BCL) tras derrotar a un Hapoel apoyado por una impresionante afición, pero incapaz de frenar al extraordinario base estadounidense de 1,75 metros de inteligencia descomunal y movimientos imparables. El equipo alemán, verdugo del Unicaja en las semifinales, culmina de esta manera una temporada de ensueño.
La afición del Hapoel ha exportado un concepto en animación pocas veces visto. Desplazamiento masivo desde Jesusalén. Más de 2.000 aficionados que dieron colorido a la ciudad y convirtieron el Carpena en una cancha de Israel. Gran repertorio de canciones y coreografías para levantar a su equipo y amedrentar al oponente. Ante semejante superioridad en las gradas los 500 seguidores del Telekom Bonn se esforzaron para estar a la altura.
Los verdugos de Unicaja y Lenovo Tenerife ofrecieron un primer tiempo donde las defensas se imponían a los ataques (9-5 min 8). En plena espesura Shorts, el MVP de la BCL, era el rey. Con un Hapoel espeso los germanos cogen una velocidad de crucero, 30-14 a los 15 minutos, que no rompe gracias a una buena racha de Randolph, la estrella de los hebreos. El 37-28 con el que se llega al descanso parece un marcador de otro tiempo.
Tras la reanudación, con la hinchada israelí sin bajar el pistón de su presión a base de canciones se acercaba hasta 37-30. Pero claro, Shorts seguía con sus diabluras y Hankins, un coloso bajo aros. Con Randolph ‘on fire’ el electrónico se aprieta (39-37). Tuomas Lisalo, el entrenador finlandés del Bonn, pide tiempo para detener un parcial de 2-9. El Tekekom no se descompone con el chileno Herrera anotando dos triples descomunales con Shorts guardado y Carrington, por parte hebrea, desaparecido (51-45 min, 27′). El tercer cuarto se cierra con 57-55.
En la recta final el fenómeno Shorts seguía con su recital de acierto y canastas de bella factura para desesperar al animoso Hapoel (66-58 min. 35). En vano. El Telekom impuso su mejor condición sobreponiéndose a la hinchada del Hapoel que no paraba de animar ni siendo conscientes de que la derrota estaba a la vuelta de la esquina. Punto final con sonrisas para el merecido ganador, lágrimas por el digno perdedor y honores para Málaga que ha organizado con matrícula de honor una Final Four impecable.