El Galatasaray provoca el apagón de La Laguna Tenerife
La Laguna Tenerife, que ganaba 40-25 a los 15’ se desconectó de manera inexplicable ante un Galatasaray donde Izundu y Cummings marcaron la diferencia. Los turcos jugarán la final y los canarios, el partido de consolación.
A los 15’ Marcelinho Huertas anota con autoridad dos puntos que lanzaban a La Laguna Tenerife hasta un claro 40-25 que amenazaba con ruptura del partido. Pero en ese instante al equipo de Txus Vidorreta se le fundieron los plomos y dieron alas a un Galatasaray que fue de menos a más e impuso su autoridad hasta ganar su plaza en la final de la Champions mandando al Tenerife al desagradable partido de consolación.
Hay varias explicaciones para este apagón. En primer lugar, la superioridad en el rebote de los turcos (35 a 29) y la destacada actuación del nigeriano Izundu con un doble-doble (21 puntos con diez rebotes para 28 de valoración. Y luego está un mal día con los triples (6/29 con tres de ellos de maquillaje final). Un mal día en el momento más inoportuno para dejar al Tenerife sin su tercera final de la Basketball Champions League (BCL).
Esperanzas frustradas
El Galatasaray comienza con fuerza amparado en su potente dueto Cummings-Young (6-11 min. 4). El Tenerife se pone las pilas con una defensa zonal muy agresiva encaminada a detener el potencial de los turcos en los lanzamientos exteriores.
Con el acierto de Marcelinho Huertas y Lluis Costase pasa del 17-20 del minuto ocho a 40-25 (min. 15) tras otra anotación del brasileño. Un parcial de 23-5 que apunta a despegue de los insulares. Pero en este punto el Galatasaray devuelve el efecto montaña aprovechando un inoportuno atasco de su oponente. Con el provisional de 3-15 el electrónico se aprieta hasta el 43-40 con el que se llega al intermedio.
Principio del fin
Tras la reanudación,el principio del fin. La Laguna sigue a la deriva. Los otomanos controlan de manera abrumadora el rebote ofensivo con Izundu y Ángel Delgado haciendo estragos bajo aros. A los 25’ Txus tiene que pedir un tiempo de reseseteo porque la situación es alarmante. 49-59 con un parcial de 6-19. Además, 2/15 en triples y Shermadini con tres personales y que sale a cancha a un todo o nada. De nuevo Izundu machaca y pasamos a 49-61. Apagón en toda regla.
Son momentos en los que se necesita, además de equilibrar la batalla del rebote defensivo el tiro exterior, que aparezca la conexión Marcelinho-Shermadini, ‘el dúo sacapuntos’. El tercer cuarto, malo de solemnidad para los tinerfeños, ofrece un inquietante 55-64.
Lejos de atisbarse reacción, el Tenerife sigue con el cortocircuito que abre la herida hasta un muy preocupante 60-74 (33’). De nuevo Txus manda a los suyos al rincón de pensar. Lo de los triples es una sangría: 3 de 21 intentos. Tras la arenga, más de lo mismo. Fallo en ataque y Palmer, con un 2+1 aumenta la hemorragia. 60-77 (34’).
Tras fallar Doornekamp el ataque de rigor, Vidorreta recibe una falta técnica y gasta su último tiempo muerto. Cummings aprovecha el regalo para poner el 60-78 que tiene todo el aroma de una derrota inevitable. El canto del cisne fue una bombita de Fitipaldo que no encuentra aro.
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Un Tenerife sin ideas sin encontrar opciones de tiro sencillas ni soluciones para ganar duelos individuales con Palmer y Cummings jugando a placer. Tras 14 victorias consecutivas en la BCL, LaLaguna Tenerife estrenó el casillero de derrotas en el momento más inoportuno y deberá jugar el siempre inoportuno ‘partido de desconsolación’.
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