El adiós de una leyenda
Rudy Fernández (39 años y 1,96 metros) pone el cierre en París, tras la derrota ante Canadá en la última jornada de la fase de grupos de los Juegos, a una carrera histórica.
Rudy Fernández dijo este viernes adiós al baloncesto en el Stade Pierre Mauroy de Lille con 39 años y tras 22 temporadas en la élite. La derrota de la Selección frente a Canadá (88-85) en la tercera jornada de la fase de grupos adelantó una despedida que nadie quería, que nadie esperaba, que todo el mundo deseaba que fuera en otro escenario, en París, con los Campos Elíseos y la Torre Eiffel de fondo como guinda a los sextos Juegos de su carrera, una cifra que nadie había alcanzado en el baloncesto masculino. Pero no pudo ser.
Con su marcha de las pistas pone punto final al equipo que ganó el Mundial 2006 y deja solo a Sergio Llull como garante de las esencias de una generación única en la Selección. Se despide el internacional con más partidos en la Absoluta masculina con 266. El único con los cuatro oros europeos y los dos mundiales en un palmarés que se eleva hasta las 11 medallas si sumamos sus dos platas olímpicas y una continental, y un par de bronces (Río 2016 y el Eurobasket 2013).
Un currículum sublime, irrepetible, consolidado por su fidelidad a la Selección, a una familia a la que ha acompañado en todos los veranos desde que fue llamado a filas para Atenas 2004 con la única excepción del verano de 2017. En total, 18 de 19 posibles. Una cuenta que ha quedado ya parada para siempre.
Rudy, el capitán, el chico que adaptó su juego con el paso de los años y de las lesiones, de los mates al triple, pero que nunca abandonó la intensidad defensiva y una inteligencia casi única en el baloncesto, no solo ha sido general en la Selección. También el Real Madrid, el club al que llegó tras su experiencia NBA (Portland y Denver) en 2012, con breve paso en 2011 por el lockout, y que ha disfrutado con su liderazgo, su calidad.
Eje central de la era Laso, el alero ha levantado 26 títulos con los blancos en 754 partidos: una Intercontinental, tres Euroligas, siete Ligas Endesa, seis Copas y nueve Supercopas. Con el Joventut, con el que aprendió a ganar, alzó una Copa, una EuroChallenge y una ULEB. Además, fue MVP del torneo del KO en 2015 y de la Final de la ACB en 2018. El primero fue en 2012 en la Supercopa.
Sus palabras tras la derrota ante Canadá
La leyenda del baloncesto español habló para el micrófono de la Cope tras la eliminación de España, en el que ha sido su último partido como profesional: “Estoy contento del trabajo que hemos hecho porque hemos luchado hasta el final, que es lo que hay que hacer cuando representas esta camiseta. No ha podido ser, pero me voy con un sabor muy bueno porque ver al equipo competir de esta manera da tranquilidad de presente y futuro. Me voy habiendo intentado lo que he intentado siempre, ayudar al equipo. Siento tristeza y paz. Paz porque llega el momento de estar tranquilo con la familia, y tristeza porque he vivido muchísimas cosas con esta Selección y el baloncesto, también en clubes, y que ya no haya más torneos ni viajes, tiene ese ambiente de tristeza y el equipo se echará de menos. A mis compañeros en el vestuario les voy a decir ‘gracias’, gracias por luchar y representar tan bien esta camiseta, y que estoy convencido de que volverán a disfrutar de títulos”.
Medallero de los Juegos Olímpicos