Los Angeles Clippers ganaron esta madrugada a los Detroit Pistons (126-111) en el Staples Center sin exprimir más de la cuenta a Kawhi Leonard (18 tantos en 25 minutos) y con un daño colateral: Paul George solo disputó 18 minutos. El alero, que firmó 12 puntos, se quedó en el banquillo tras el descanso por una lesión en los isquiotibiales de la pierna izquierda. Se desconoce por el momento el alcance de su dolencia y cuánto tiempo deberá estar en el dique seco.

La lesión de George dejó, de todas formas, una lectura muy positiva para Doc Rivers. El resto de sus pupilos dio un paso al frente para doblegar a la franquicia de la MoTown, que sumó su tercera derrota consecutiva, la octava en los últimos diez partidos, dejándola en la 11º posición de la Conferencia Este, a tres encuentros y medio de la octava plaza, la última que da acceso a los playoffs. Harrell fue el máximo anotador del duelo con 23 puntos, seguido de Lou Williams con 22. Ambos salieron desde el banquillo. Son los dos mejores sextos hombres de la franquicia angelina: el pívot es el cuarto en puntos de los Clippers con 18,6, mientras que el escolta (el gran especialista de la NBA en este rol) es el tercero con 19.

Los Clippers dominaron tanto el rebote (52-45) como el lanzamiento (53,8%-42,6%), dos aspectos que le permitieron dispararse en el marcador ya en el segundo cuarto con una ventaja de 15 puntos (35-20) cuando solo se lleva disputado un minuto. La distancia llegó a ser abusiva en el arranque del cuarto final: 31 tantos (110-79). Una lluvia constante imposible de frenar sin Blake Griffin (rodilla izquierda) y con un Drummond seco (10 puntos y 12 rebotes).