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LIGA ENDESA | 15ª JORNADA | MOVISTAR ESTUDIANTES 93-REAL MADRID 88

El Real Madrid hinca la rodilla ante Gentile y el Estudiantes

El italiano anotó diez de sus 25 puntos en el último cuarto. Los colegiales salen del descenso y pueden ir a la Copa. Llull, casi remonta él solo el partido.

Alessandro Gentile anota ante la defensa de Gustavo Ayón durante el derbi entre el Movistar Estudiantes y el Real Madrid.
Alessandro Gentile anota ante la defensa de Gustavo Ayón durante el derbi entre el Movistar Estudiantes y el Real Madrid.EDUARDO CANDELDIARIO AS

Desde hace casi una década el Real Madrid es un transatlántico y el Movistar Estudiantes, un barquito de papel. Por presupuesto y estilo. Por presencia e identificación del equipo con la grada. Los blancos son un bloque compacto que continúa año tras año y los colegiales, un ir y venir de jugadores verano tras verano. Pero un derbi es un derbi. Y los ramireños sorprendieron a su eterno rival con los ingredientes tradicionales, garra e intensidad, y se llevaron el duelo de la capital por primera vez desde diciembre de 2014. Ganaron ocho enfrentamientos después con un Gentile majestuoso. El italiano, en su décimo partido con el Estu, anotó 25 puntos, 10 en el periodo final: en dos minutos agarró al Madrid por la pechera y le infligió su cuarta derrota de la temporada.

Las primeras líneas del guion no eran las esperadas. Los estudiantiles se lanzaron al cuerpo a cuerpo contra los blancos y respondieron a todas las andanadas: el buen inicio de Yusta era contrarrestado con el descaro de Gentile, el dominio de Ayón bajo los tableros con la velocidad de Brizuela y los triples de Whittington... A la carrera y con un acierto casi impoluto en los primeros siete minutos (9 de 10 en tiros de campo, 4 de 4 desde el triple) el estirón llegó (23-17). Esa alegría duró lo que quiso Ayón. Tres buenos movimientos en la zona, seis tantos y turno para Thompkins, primero, y luego para la versión ultramejorada de Rudy Fernández. El descanso de los dos últimos veranos le ha rejuvenecido una década y en tan solo diez minutos lo revolucionó todo: 14 puntos (4 de 6 triples, algunos estratosféricos) para 16 de valoración en 10 minutos.

El balear vestía a un emperador que hacía aguas atrás. "No hay ni una buena defensa", criticaba Pablo Laso a sus pupilos, que al medio tiempo ya habían recibido 46 tantos, once de ellos de Darío Brizuela. El escolta no se cansó de dar pequeños pinchazos a su rival y Whittington (16) aleccionaba a los blancos como ya hizo hace dos meses cuando aún vestía la camiseta del MoraBanc Andorra.

El momento Llull

Pero el actual campeón de Europa no moría. Una y otra vez encontraba respuesta a la rebeldía colegial, con el rebote por bandera (33 a 42), y empataba al inicio del cuarto periodo (66-66). Sin Campazzo (tres puntos en 23 minutos) y Tavares (uno en 13) presentes, los de Laso vieron como su rival casi sentenciaba a un minuto del final (88-77). En ese instante, Llull se disfrazó del Increíble: tres triples seguidos (91-88). El masivo paro cardiaco en el Palacio no se consumó y los colegiales sumaron su victoria 1.000 entre ACB y Liga Nacional, salen del descenso y están cerca de jugar la próxima Copa del Rey como anfitrión. Quién te ha visto y quién te ve.