El mundo está repleto de personas peculiares con historias llamativas. La de este artículo cumple estos dos requisitos de manera evidente, tanto por su protagonista como por los motivos que lo han llevado a que su historia sea contada. Mr Li es el hombre en cuestión y un boleto premiado de lotería la razón.

La historia ocurrió en China en octubre de 2022, según recogía Bloomberg citando medios locales. La protagoniza un hombre identificado como Señor Li, cuyo décimo de lotería fue premiado con 219 millones de yuanes, alrededor de 26 millones de euros en Nanning, Guangxi. Hasta este punto, poco que resaltar más allá del papel que la suerte había jugado en favor de Li, cambiándole por completo la vida... o al menos, eso parecería ante los ojos de cualquiera, pero no fue así.

Li fue a cobrar el premio disfrazado, algo que de por sí ya es una forma particular de protagonizar uno de los momentos más importantes de su vida. Pero lo verdaderamente importante en esta trama es el motivo del por qué de su actitud a la hora de recoger el cheque con la cantidad ya mencionada.

El motivo, inaudito

Por todos es sabida la disciplina y filosofía a la hora de trabajar de ciertos países asiáticos, como puede ser el caso de Japón o China, pero este hombre ha ido mucho más allá. Su única razón para acudir a la administración con un disfraz amarillo era nada más y nada menos que el de ocultar a su familia (mujer e hijo) que había sido el afortunado ganador del premio.

“He querido que no se me reconozca para que mi mujer y mi hijo no ser vuelvan perezosos”, apuntaban los medios citados. De hecho, esta práctica es bastante habitual en el gigante asiático, según confirmaba el medio chino South China Morning Post.

“No lo he hecho por temor a que fueran demasiado complacientes y no trabajaran duro en el futuro”; confesaba tras ganar el premio. Además, el afortunado ganador relataba que que había pasado el fin de semana en un hotel por el pánico que le daba salir a la calle y perder el boleto.