Una madre trabaja durante 16 años, la despiden y se queda sin paro por no pasar el periodo de prueba
Dejó un trabajo en el que llevaba ocho meses para iniciar un nuevo proyecto. No superó el periodo de prueba “por necesidades de la empresa” y se quedó sin paro al renunciar al anterior empleo.
Cuando uno deja un trabajo lo puede hacer por estar incómodo en su actual puesto o por buscar una mejora (ya sea laboral o económica, aunque una cosa suele acompañar a la otra). Siempre se intenta mejorar, buscar nuevas oportunidades y ‘lanzarse’ a la piscina, aunque con la seguridad de tener un colchón y una trayectoria profesional que le respalda.
Pero hay veces que las cosas no salen bien y uno se encuentra en una situación delicada. Algo a lo que ha tenido que hacer frente una lectora de RAC1, la radio de Cataluña. A través de una carta enviada al medio, pone de manifiesto su situación: una mujer de 37 años, divorciada, con una hija de siete años y custodia compartida. Y que, además, debe pagar una hipoteca. Un cambio en su trabajo, para mejorar, se vio frustrado al no superar el periodo de prueba y no tener derecho a paro.
“He trabajado desde los 16 años, en verano, compaginándolo con los estudios postobligatorios, y en mi vida laboral constan más de 16 años trabajados sin haber dispuesto nunca del paro. Pues se ve que en este país no es suficiente y cuando decides prosperar laboralmente tienes que vigilar mucho”, comienza su escrito. Una trayectoria laboral en la que cuenta con 14 años en una misma empresa y ocho meses en otra. Un prematuro cambio, cuando estaba en una multinacional, para marcharse a una pequeña empresa que le presenta un nuevo e ilusionante proyecto.
Y que, además, estaba cerca de su casa (mientras que en el anterior se encontraba más lejos). “Me incorporo contenta y con proyección. Era un cargo intermedio, con estudios técnicos y un sueldo medio. La sorpresa viene cuando se me dice que no supero el período de prueba por necesidades de la empresa y que prescinden de mis servicios”. Eso sí, añade, la empresa le ofrece una carta de recomendación al no poderle recriminar nada. “Aquí llega mi periplo por el desierto”.
Sin paro ni ayuda de ningún tipo
Y es que, asegura, no tiene derecho a paro al haber dejado su anterior trabajo de forma voluntaria (“para prosperar”, recalca) y al no haber superado el periodo de prueba. Tampoco tiene derecho a la renta mínima garantizada. “Estoy decepcionada con el sistema, indignada con el Estado y muy preocupada porque no sabía cómo pagar las facturas ni la hipoteca. No es justo que habiendo cotizado tantos años nada garantice un pequeño apoyo cuando hay gente que con toda la perspicacia del mundo accede a ayudas. Nunca he necesitado ninguna prestación y cuando la necesito no tengo acceso”.
Noticias relacionadas
Una piedra en el camino que pudo superar gracias a los “mínimos ahorros que tenía” y al apoyo de la familia. Ahora, después de superar ese momento, está a punto de empezar en un nuevo trabajo. “Todo el mundo piensa que ‘a mí no me tocará, tengo un buen trabajo y unos estudios’. Pues sí, señores y señoras, eso pasa. Luego nos sorprendemos con la gente que se queda o se aposenta en un puesto de trabajo de por vida aunque su rendimiento sea bajo? No, es comodidad y cerebro, porque si sale mal el cambio te encuentras sin nada”, concluye.
¡Tus opiniones importan! Comenta en los artículos y suscríbete gratis a nuestra newsletter y a las alertas informativas en la App o el canal de WhatsApp. ¿Buscas licenciar contenido? Haz clic aquí
Rellene su nombre y apellidos para comentar