Un panadero aplica la jornada laboral de cuatro días sin bajadas de sueldo: “También habría que contar el número de carcajadas”

La panadería Louboulbil de Castelsagrat (en Tarn y Garona), en el cantón de Valence, ha decidido dar un paso más en las políticas de mejora para sus trabajadores. Han establecido condiciones de trabajo muy generosas para todos (hasta 3 mil euros al mes), cuatro días de jornada laboral y diez semanas de vacaciones al año.

Algo de lo que ya disfrutan los 30 empleados de la panadería. “Todo empezó cuando yo era ejecutivo de la empresa Vinci en París, y sólo tenía cinco semanas libres para ir a ver a mi familia y a mis suegros. Para mí, teníamos que empezar con una nueva forma de organizarnos“, afirma el creador de la panadería en 1997.

“Podemos decir que somos una empresa anárquica, pero anárquica en el sentido de que hay muchas libertades“, asegura la vendedora Nathalie Tessier. La panadería Louboulbil vende 300 toneladas de pan producidas al año en los 17 mercados de la región francesa del sur.

Quien quiera trabajar en la panadería debe saber que no hay límites, para bien y para mal; quiere que no haya jerarquías pero sí que todo funcione, que todo el mundo sepa lo que quiere hacer. “La panadería es un trabajo difícil, empezamos temprano, trabajamos los sábados y domingos, la gente también necesita poder pasar tiempo con sus familias”, afirma Jean-Pierre Delboulbe.

El panadero habla de BIB, de la felicidad interior bruta, explica a La Dépêche, señalando un documento que enumera el número de semanas de permiso de cada empleado, todo el mundo sabe lo que tiene que hacer y cómo hacerlo, no hace falta que le estén fiscalizando.

Sigue el canal de Diario AS en WhatsApp, donde encontrarás todo el deporte en un solo espacio: la actualidad del día, la agenda con la última hora de los eventos deportivos más importantes, las imágenes más destacadas, la opinión de las mejores firmas de AS, reportajes, vídeos, y algo de humor de vez en cuando.