Un niño encuentra el ‘Santo Grial’ de las piezas de LEGO tras dos años de búsqueda en una playa
Se trata de un pulpo de LEGO que llevaba desaparecido en las profundidades marinas desde 1997, cuando un buque de carga tuvo un accidente a causa de una tormenta.
Un chico de 13 años ha encontrado un pulpo de LEGO en la playa de Marazion, Cornwall, después de casi dos años de búsqueda. Aunque a priori parece una pieza normal, en realidad se trata de un objeto de gran valor coleccionista que se perdió en las profundidades marítimas en la década de 1990 debido a un accidente de un barco de carga. Durante su incansable labor de búsqueda, el niño ha recuperado casi 800 piezas.
Liutauras Cemolonskas, el joven coleccionista, asegura estar feliz de haber encontrado el tan exclusivo pulpo de plástico, que fue una de los casi cinco millones de piezas de LEGO que cayeron al mar en 1997 cuando un carguero se topó con una tormenta. Según informa The Independent, a esta famosa pieza se la conoce como el ‘Santo Grial’.
El chico ha afirmado que lleva casi dos años de búsqueda acudiendo a las playas locales con frecuencia en busca de los desaparecidos fragmentos de plástico. Acompañado de sus padres, Liutauras ha recuperado ya 789 piezas de LEGO.
Solo 4.200 pulpos a bordo
El buque de carga que se hundió en 1997 transportaba 62 contenedores de la famosa marca de juguetes de construcción, todos ellos perdidos en las profundidades marítimas por culpa de una tormenta. Entre las piezas que cayeron al mar se encontraban 352.000 pares de aletas, 97.500 tanques de buceo y 92.400 espadas.
Sin embargo, de los millones de ejemplares naufragados, los pulpos son los objetos más preciados ya que solo había 4.200 a bordo. La última vez que se encontró una de estas piezas fue hace 18 años, por ello esto es tan importante en el mundo del coleccionismo.
Una incansable búsqueda
“Hemos estado buscando ese pulpo durante dos años, no es fácil de encontrar. No esperábamos encontrarlo porque es muy raro”, ha declarado el padre del joven cazador de tesoros, Vytautas, a la agencia de noticias PA Media.
En este contexto, tan solo unos pocos días después la joven Tracey Williams encontró el segundo ejemplar de pulpo. Ella está detrás del proyecto Lego Lost at Sea que se encarga de buscar las piezas y de limpiar todo el plástico que cae al mar y es arrastrado a las costas. Williams asume que el éxito de su búsqueda pudo haberse dado a “una marea muy alta” que arrastró los ejemplares a la playa.
Lejos de terminar aquí su pasión por las piezas pérdida, Liatauras ha dado a conocer ya su siguiente objetivo: encontrar uno de los 33.941 dragones que desaparecieron en el mismo accidente marítimo. Continua así el hobby tintado de arqueología que tanto apasiona al joven británico.
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