Un estudio afirma que mantener unos ciclos de sueño irregulares pueden producir diabetes

La revista Diabetes Care ha publicado un nuevo estudio que asegura que un ritmo circadiano irregular y horarios variables para acostarse y despertarse pueden estar asociados con un mayor riesgo de desarrollar diabetes tipo 2. Es muy común y de hecho cada vez más, ver a mucha gente por la calle con relojes inteligentes que cuentan sus pasos, analizan su actividad física y que están conectados con el móvil para recibir llamadas o hacer pagos.

Para esta investigación, se han analizado los datos de seguimientos diarios de más de 73.000 personas adultas durante ocho años. Los participantes del estudio llevaban una de estas famosas pulseras de actividad que permitía conocer la hora a la que se despertaban y se acostaban cada uno de ellos.

Muchas horas de sueño no significa que sean de calidad.

En el estudio, se observó que aquellos que tienen un ritmo circadiano irregular, es decir, que no duermen bien o no tienen un descanso profundo y continuado, tienen un tercio más de riesgo de desarrollar diabetes tipo 2, que aquellos que tienen un buen descanso. Así concluyeron los expertos tras analizar el sueño de los participantes. Además, añadieron que no tiene que ver con las horas de sueños de los pacientes, sino con el descanso efectivo que se produce durante el sueño.

Los resultados sugieren una conexión entre un ritmo circadiano irregular y la diabetes tipo 2, pero muchos otros factores del estilo de vida también pueden explicar los resultados.

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