Un concejal pide a los vecinos de Santorini que se confinen
Con más de 5,5 millones de turistas al año, la isla de Santorini está pensando en limitar la llegada de visitantes por los efectos negativos de la masificación.
Grecia ha experimentado una notable masificación como destino turístico en las últimas décadas. Su rica herencia histórica, playas paradisíacas y una cultura vibrante han atraído a millones de visitantes anualmente. Sin embargo, aunque este auge turístico pueda llegar a ser beneficioso para la economía, a la larga esto puede resultar un problema para el país.
En este caso, Panos Kavalaris, concejal de la isla de Santorini, ante la llegada en crucero de 17.000 turistas, ha publicado en su perfil de Facebook un mensaje diciendo: “Emergencia. ¡¡¡Otro día difícil para nuestra ciudad y la isla con la llegada de 17.000 visitantes de cruceros!!! ¡¡¡Pedimos vuestra atención y la reducción de nuestros desplazamientos lo máximo posible!!!”. Pocas horas después, ante las fuertes críticas, Kavalaris borró la publicación.
La perla del Egeo
Y es que esta isla, una de las joyas del país griego, lleva sufriendo los efectos del turismo masivo desde que termino la pandemia del Covid-19. Con algo más de 15.000 residentes permanentes, actualmente Santorini recibe al año más de 5,5 millones de turistas. Además, en el 2023 hicieron escala en esta isla ochocientos cruceros que transportaron un total de 1,3 millones de turistas, un 23% más que en 2023.
El pasado mes de junio el primer ministro griego, Kyriakos Mitsotakis afirmó que desde el próximo año se limitarán las llegadas de cruceros a Santorini y Mykonos, las dos islas del país más afectadas por el turismo masivo. Por su parte, el alcalde de Santorini, Nikos Zorzos, ha denunciado la sobreconstrucción de la isla, con un 20% de la superficie cubierta por edificios, ha pedido que no se concedan licencias para hoteles e inmuebles de corta estancia y que se detengan de forma inminente las construcciones fuera de la zona urbana.
Algunas personas han pedido que se cobre una tasa a los visitantes que llegan a Santorini en crucero. Sin embargo, la ley helena establece que la tarifa máxima no puede superar los 0,35 euros por pasajero, una cantidad que no cubre el gasto, por ejemplo, de recogida de basura que produce cada visitante.
Un peligro inminente
Según un informe presentado durante la conferencia “Insularidad y sostenibilidad: islas al borde del colapso” organizada por la Universidad del Egeo, el consumo de agua en Santorini se ha duplicado en los últimos años, lo que resulta un peligro para los recursos de la isla.
De 2022 al 2023, el consumo de agua aumentó un 22%. Además, en cuanto al consumo de electricidad, se prevé que este año se superen los 65 MW debido a las altas temperaturas que han azotado el país durante el mes de julio.
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