Las tensiones entre PP y PSOE por la DGT y los peajes en las carreteras
Pere Navarro, director de la Dirección General de Tráfico, ha asegurado en una entrevista que Bruselas impondrá a España la implantación de un sistema de pagos en las carreteras
La cuestión de los peajes parece no tener fin. Feijóo ha aseverado numerosas veces y con contundencia que, más pronto que tarde, España tendrá que multiplicar los kilómetros de peaje en sus carreteras. Con esa misma contundencia, Pedro Sánchez ha negado la mayor. Es un tema polémico, principalmente porque ambos partidos sostienen que el otro miente deliberadamente con fines electoralistas.
Cuca Gamarra repitió el mantra feijoista en el debate portavoces a siete bandas organizado por RTVE. Patxi López, en representación de Pedro Sánchez, volvió a rechazar vehementemente la idea. La mayoría de los espectadores, por lo tanto, se quedaron con la duda de quién decía la verdad. Una duda que, de hecho, aún no ha sido resuelta del todo. El tiempo dirá si los gravámenes llegarán a los caminos pavimentados del España.
Pere Navarro, director de la Dirección General de Tráfico, se ha alineado -o eso parece- con la versión del líder de la oposición. Al menos lo hizo en un primer momento, en una entrevista televisiva en Els Matins, de TV3. Según el máximo responsable del órgano público, Bruselas habría “impuesto” la colocación de nuevos puntos de peajes en las autovías nacionales como parte del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia.
El objetivo europeo sería costear con estos cobros adicionales la modernización de las vías que atraviesan el territorio. De esta forma, no sería necesario pagar estas facturas con fondos comunitarios, y estos podrían ser empleados en otras áreas que se estiman más urgentes. “Tendremos que poner peajes”, ha sentenciado Navarro en su conversación televisada. Una afirmación que no deja demasiado lugar a la interpretación.
Mentir y desmentir
Sin embargo, la oficialidad sigue sosteniendo su posición inicial. El ejecutivo garantiza que no habrá un plan generalizado de aumento de los peajes. Empezando por la ministra de Transportes, oficina de la que depende en última instancia la DGT. Raquel Sánchez ha sido rauda en salir a “desmentir categóricamente” las declaraciones de Navarro. Y no se ha quedado ahí. También ha puntualizado que, bajo a actual administración, se han liberado hasta un millar de kilómetros de autovía que en el pasado habían sido de pago.
Algo que, en principio, podría parecer un tema de calado menor, ha acabado convirtiéndose en una de las más encendidas variables de la campaña electoral -que, de momento, está marcada por una visible fricción entre el líder del gobierno y el cabeza de la oposición-. La verdad, como siempre, la desenterrará el tiempo.