¿Se puede meter comida de fuera en el cine? Esto dice la Ley en España
Los precios de la comida y los refrescos en el cine hacen que cada vez más espectadores opten por comprar lo que que quieren tomar en otros establecimientos
Ir al cine ha sido tradicionalmente una de las actividades culturales preferidas de los españoles, a pesar de que por diversos motivos en los últimos años cada vez es menor el porcentaje de personas que acuden a las salas a disfrutar del estreno de las películas.
Desde hace unos años ir al cine empieza a convertirse en un capricho eventual más que en una actividad lúdica que poder realizar usualmente. A pesar de que se van añadiendo ofertas y rebajas, los precios de las entradas han ido aumentando progresivamente, un factor diferencial al que se añaden otros impedimentos como los altos precios establecidos para la comida en las salas españolas.
Las palomitas, la comida rápida y los refrescos son alimentos que tenemos asociados a ver una película, más aún si lo hacemos en la gran pantalla. Y puede que sea por esta tradición que comprar comida en el cine salga a precio de oro y haga plantearse a los espectadores si realmente merece la pena.
Es cada vez más común que aquellos que acuden al cine se lleven la comida de casa o, en su defecto, la compren en otros establecimientos, a pesar de que en muchas salas acostumbramos a ver mensajes que prohíben acceder con productos externos al cine, escudándose en su mayoría en que los cines cuentan con servicio de bar.
¿Se puede pasar con comida de fuera al cine?
La Asociación Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN), un organismo dependiente del Ministerio de Consumo, estableció en un informe realizado en 2017 que “prohibir la entrada de comida y bebida adquirida en el exterior de la sala de cine es ilegal y tiene carácter abusivo”.
Esta afirmación se debe a que la actividad principal de los cines no es la venta de alimentos o el servicio de bar, por tanto al sí permitir el consumo de los mismos en sus salas pero no ser su venta la actividad principal de la empresa, es ilegal prohibir a los espectadores que acudan con el producto desde fuera.
Por tanto, si alguna vez nos encontramos con la situación de que se nos impide acceder al cine con nuestras palomitas traídas de casa, podremos exigir que se respeten nuestros derechos ya que se estaría cometiendo una acción ilegal.