Salen a la luz nuevos datos de la muerte de Jay Slater, el adolescente británico que murió en Tenerife
El joven había consumido varias drogas antes de desaparecer el 17 de junio de 2024 tras asistir al festival de música NRG en el club Papagayo.

Jay Slater, el adolescente británico hallado muerto en Tenerife tras una intensa búsqueda de cuatro semanas, había consumido drogas y alcohol y se encontraba a 14 horas a pie de su alojamiento, según ha revelado la investigación judicial en Reino Unido, de la que se hace eco The Guardian. El joven, de 19 años y natural de Lancashire, desapareció el 17 de junio de 2024 tras asistir al festival de música NRG en el club Papagayo, en Playa de las Américas.
Uno de sus amigos, Bradley Geoghegan, que se encontraba con él de vacaciones en la isla, declaró este jueves ante el tribunal forense de Preston que Jay había consumido pastillas de éxtasis, cocaína y posiblemente ketamina, además de alcohol, antes de irse a un apartamento de Airbnb con dos desconocidos. Según relató, Slater le hizo una videollamada esa misma mañana. “Le dije: ‘pon el mapa para ver lo lejos que estás’. Eran como 14 horas andando o una hora en coche. Le dije: ‘Coge un taxi de vuelta’, y entonces él dijo: ‘Te llamo luego’”.
Geoghegan añadió que creía que Slater no llevaba dinero encima y que en Tenerife los taxis exigían el pago por adelantado. También subrayó que en esa llamada no percibió que su amigo tuviera miedo ni estuviera coaccionado. “No. Creo que probablemente llegó allí, pensó ‘¿qué hago aquí?’, se le pasó un poco el efecto y decidió volver”, explicó.
Las pruebas recabadas durante la investigación indican que Slater abandonó el apartamento turístico y, al no lograr encontrar un autobús o un taxi, intentó regresar caminando a su alojamiento y cayó desde una altura en una zona escarpada, lo que provocó su muerte. Su cuerpo fue hallado el 15 de julio por un equipo de rescate de montaña de la Guardia Civil, en una zona de difícil acceso cerca del pueblo de Masca, en el noroeste de la isla.
El forense del Ministerio del Interior británico, el doctor Richard Shepherd, concluyó que la causa de la muerte fueron lesiones en la cabeza, sin signos de agresión ni de haber sido inmovilizado. El patrón de lesiones era compatible con una caída desde una altura. Además, los análisis toxicológicos confirmaron la presencia de alcohol, éxtasis, cocaína y ketamina en su organismo.
La familia de Slater, que depositó flores en el lugar donde fue hallado el cuerpo, solicitó reanudar la vista judicial después de que varios testigos no comparecieran en la sesión anterior celebrada en mayo. Durante esa noche, amigos le habían enviado mensajes advirtiéndole que regresara porque estaba “fuera de sí” y otros le alertaban del intenso calor del día. Los datos del móvil de Jay dejaron de registrar actividad a las 8:51 de la mañana, lo que indica que la batería se agotó.
Últimos momentos y hallazgos forenses
Durante la vista de mayo, varios expertos ya habían declarado, incluyendo un especialista en toxicología que confirmó la mezcla de sustancias encontrada en su cuerpo.
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Las autoridades consideran que el accidente ocurrió en su intento por volver andando al hotel, desorientado y bajo los efectos de las drogas y el alcohol, en condiciones físicas adversas y con una temperatura elevada.
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