Salen a la luz los audios del tren que descarriló en Atocha: “La he cagado”
El tren descarrilado viajaba cuesta abajo, sin frenos y bajo ningún control, acercándose a otro convoy detenido lleno de pasajeros.
La red ferroviaria de Madrid se volvió todo un caos este fin de semana tras el descarrilamiento de un tren en el túnel de alta velocidad que une las estaciones de Atocha y Chamartín. Miles de viajeros se vieron afectados y los retrasos se acumularon a lo largo de todo el fin de semana tras un incidente que pone en entredicho la capacidad de los vestíbulos de las dos principales estaciones de la capital, pero también la dependencia del túnel que las une. El sistema colapsa con un fallo en la vía subterránea Atocha-Chamartín, que mide apenas 7.300 metros.
Existen varias versiones sobre el motivo del descarrilamiento. Un audio de WhatsApp de un miembro del personal de Control de Tráfico Centralizado (CTC) de Adif, al que ha accedido Vozpópuli, asegura que el tren viajaba sin control y “se iba a estampar” con un tren de viajeros que estaba detenido en el túnel, a la altura de Jardín Botánico. Para evitar una colisión, el trabajador del CTC explica que los responsables movieron las agujas de las vías para que el convoy, descontrolado, se desviase.
Todo comenzó cuando un tren remolcador trataba de mover un convoy averiado hasta Chamartín, pero no tenía potencia suficiente para subir una pronunciada cuesta y tuvo que desistir. Más tarde, intentó la maniobra de nuevo, pero el tren averiado recorrió sin maquinista y fuera de control unos cuatro kilómetros, desde Chamartín hasta Jardín Botánico. Fue entonces cuando los responsables decidieron hacer descarrilar el convoy y evitar una colisión con otro tren detenido y lleno de pasajeros.
“Decían que iba a toda hostia. Encima, hay una pendiente. La unidad esa (el tren averiado y descontrolado) ha ido a la deriva todo el túnel hasta Jardín Botánico y ahí había un tren con viajeros esperando, parado. Entonces, se iba a estampar el que iba a la deriva con el tren de viajeros”, indica el trabajador de Adif en el audio, que asegura que no hubo “una cagada, sino varias, del maquinista y de los mecánicos”. El audio también recoge el testimonio de uno de los maquinistas implicados: “La he cagado, la he cagado. Me van a echar”.
Según explica El Mundo, fuentes de Renfe no han valorado la autenticidad del audio filtrado, pero han puesto en duda que los hechos narrados sean totalmente verídicos. “Será la comisión de seguridad que investigue el accidente la que emplee todos los medios técnicos para determinar exactamente qué sucedió”, ha explicado un portavoz, que niega, por ejemplo, que el tren averiado alcanzase los 100 o 200 km/H. Ese medio también asegura que, cuando el tren remolcador trasladaba el tren averiado, este último se desenganchó. La causa “podría deberse a la negligencia de uno de los dos mecánicos”, indican.
Finalmente, el ministro de Transportes, Óscar Puente, ha confirmado la versión explicada en los audios. “Un tren iba remolcado a taller. En un momento determinado, por razones que yo no puedo exponer y que se esclarecerán en el informe, ese tren que iba remolcado se suelta del remolcador e inicia un recorrido, digamos que en caída libre, por el túnel de Chamartín [...] Un trabajador del centro de control de Adif tomó la decisión de desviar el tren a una de las vías para provocar su descarrilamiento y evitar que acabara saliendo a la playa de vías de Atocha, pudiendo eventualmente chocar con algún tren que viniera”, ha indicado Puente.
El incidente de este fin de semana es el de mayor escala jamás conocido en la Alta Velocidad española. Unas 25.000 personas se vieron afectadas y quedaron varadas en los vestíbulos de Atocha y Chamartín. La clave es el túnel que las une, una vía de apenas 7 kilómetros que, como se ha demostrado, tiene una enorme relevancia para el resto de vías de la Alta Velocidad de nuestro país.
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