Renuncia a su sueldo elevado a los 41 años y se muda al mejor país para los jubilados: “Me ahorro 4.200 euros al mes”
Un hombre se muda de Estados Unidos a Portugal, prejubilándose a los 41 años mientras su patrimonio sube.
Esta es la historia de Alex Trias, un estadounidense que, en 2011, decidió abandonar su trabajo como abogado y la vida le sonrió, pues ahora ha conseguido jubilarse a los 41 años. Según explica en la CNBC, llevaba décadas trabajando y tras conseguir ahorros de seis cifras en su cuenta corriente, se marchó del trabajo y del país.
El hombre se ha mudado a Portugal, el país “donde más quieren mudarse los estadounidenses”, a su juicio. “Paso mi tiempo libre disfrutando de la gastronomía local con amigos y recorriendo los senderos costeros llenos de flores silvestres. Jubilarme anticipadamente es una de las mejores decisiones que he tomado... pero recuerdo lo abrumador que me sentí al principio”, señala.
Así, el hombre intenta animar a otras personas a que hagan algo parecido, a que se muden a otros lugares si así lo desean, porque “la incertidumbre es una oportunidad, no un obstáculo”.
“Seguí un camino predecible durante la mayor parte de mi vida adulta: la facultad de derecho, trabajos de verano como asociado y, finalmente, una carrera legal estable. Entonces llegó la crisis financiera de 2008. El bufete para el que trabajaba se derrumbó, y con él, mi rumbo. No me imaginaba haciendo otra cosa que no fuera ejercer la abogacía”, relata el hombre, que finalmente, se mudó a Portugal, donde no conocía a nadie ni sabía su idioma.
Por otro lado, cuando Trias se mudó a Portugal con su mujer, a pesar de dejar de trabajar, ahorraron muchísimo, pues en Washington gastaban muchísimo en impuestos sobre la renta, en seguros médicos y en impuestos sobre la propiedad, entre otros. “En total, estimamos que ahorramos unos 5.000 dólares (unos 4.200 euros) al mes solo por vivir en el extranjero”, señala.
“Seguimos la misma estrategia financiera que cuando trabajábamos: vivimos por debajo de nuestras posibilidades, reinvertimos la diferencia y dejamos que la capitalización haga el trabajo. La única diferencia es que ahora, en lugar de salarios, nuestros ingresos provienen de inversiones”, indica el hombre.
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