Regresa el tren nocturno París-Berlín
El recorrido, que había sido cancelado hace nueve años, responde a una tendencia a la alza de usar este tipo de transporte más sostenible. El trayecto dura entre 12 y 13 horas y las reservas ya se han agotado en el mes de diciembre.
Es 12 de diciembre de 2014. Un pequeño grupo de personas se concentra en el Gare de l’Est en París frente a un tren que está a punto de partir. Es el último viaje nocturno anunciado del recorrido París-Berlín, que va a ser cancelado por la falta de demanda y el envejecimiento de los vagones y los coches cama. Los protestantes se colocan en dos filas, no deben ser más de 25 personas, y cada uno levanta por encima de su cabeza un cartel luminoso con una letra, al juntarlas se lee la frase: “salvemos el tren nocturno”. Cuando todos han levantado sus letras salen corriendo dando saltitos hacia la cámara, muchos sonríen, quizás percatándose de lo ridículo de la situación. La protesta, como era de esperar, no fue capaz de conmover la conciencia de ningún alto cargo ferroviario y, minutos más tarde, el último tren partía, dejando atrás los corazones rotos de todos aquellos amantes del gran caballo de hierro. Nueve años más tarde, el tren nocturno entre Berlín y París vuelve a estar en marcha. Este lunes partió el primero y, aquellos que hace casi una década lo vieron salir de la estación para siempre, ahora se reconfortan pensando que ningún tren pasa solo una vez en la vida.
Aumento de viajes
La conciencia climática, el abaratamiento de los precios y una oferta cada vez mayor están provocando un aumento significativo del número de viajeros que, durante los últimos años, optan por utilizar el tren como alternativa al avión o al coche a la hora de viajar. Este fenómeno se está dando en toda Europa y España no ha sido una excepción, ya que en nuestro país durante el 2022 el número de viajeros ferroviarios aumentó en un 36% (para un total de 440 millones) y el de trenes de larga distancia en un 65%. Este crecimiento ha provocado, entre otras cosas, la vuelta del trayecto nocturno París-Berlín, muy valorado entre los clientes habituales de este tipo de viaje.
Viaje de en-sueño
El tren, equipado con compartimentos para dormir ordinarios y de lujo, con espacios individuales o compartidos y algunos incluso con duchas y aseos exclusivos, sale de Berlín a las 8 de la noche y llega a Paris alrededor de las 10 de la mañana. Durante el trayecto para en Halle, Erfurt, Mannheim y Estrasburgo y en principio operará tres veces por semana, aunque se espera que para el otoño de 2024 el servicio sea diario. Una de las ventajas de este medio de transporte es su comodidad, ya que permite a los pasajeros viajar de una capital a otra mientras duermen, lo que hace que, a pesar de ser un trayecto de 12-13 horas, uno tenga la sensación de que apenas ha tenido tiempo de viaje.
Por ahora la compañía encargada de los viajes es la empresa ferroviaria estatal austriaca, ÖBB, que debe estar contenta con los resultados de su apuesta ya que, de momento, es imposible reservar una plaza durante el período vacacional y hay que esperar hasta enero para encontrar un hueco. Esta parecer estar siendo la dinámica habitual en las reservas de muchos de estos trenes nocturnos. ÖBB, que ha creado una gran red de trenes nocturnos a través de Europa, agota los asientos para algunos de estos viajes apenas minutos después de ser anunciados.
Alternativa sostenible
A la hora de considerar este tipo de viajes, aparte de la comodidad y la belleza del paisaje, hay que tener en cuenta que la alternativa ferroviaria, en oposición al avión, es mucho más ecológica. Según datos de la Agencia Europea del Medio Ambiente, los aviones, con capacidad para menos viajeros, emiten de media 4,84 veces más gases de efecto invernadero que los trenes. El tren no solo está siendo la apuesta de cada vez más viajeros, sino que también gobiernos como el español están intentando fomentarlo. Uno de los acuerdos entre Sumar y PSOE es el de reducir los vuelos domésticos en todas aquellas rutas donde haya posibilidad de viajar tren y se tarde menos de dos horas y media.