Quiénes son los ‘petaqueros’, los aliados de los narcos en altamar
Este grupo de personas se encarga de entregar combustible a las narcolanchas que esperan en alta mar para entregar la droga en las costas.
En 2018 las autoridades prohibieron las narcolanchas, una medida tomada para obstaculizar el ejercicio del narcotráfico, porque ese tipo de embarcaciones ya no podría circular cerca de las costas españolas. ¿Cómo repostarían entonces si no podían ‘vivir’ en territorio español? El tráfico de drogas ha encontrado en los ‘petaqueros’ la solución.
Los petaqueros son otro tipo de barcazas que, de momento, sí están permitidas en España. Estas se encargan de llevar combustible a las narcolanchas, que esperan en alta mar, a kilómetros de la costa, para repostar. Una vez reciben el combustible y llenan los depósitos, se internan rápidamente en las costas para hacer las entregas.
Según datos recogidos por El País, desde que se prohibieran las narcolanchas en 2018, las autoridades han intervenido más de 800.000 litros de gasolina. No solo entregan combustible. Según el CRAIN, el órgano de inteligencia contra el narco de la Guardia Civil en Andalucía, los petaqueros también llevan víveres y ropa a las narcolanchas. Además, hacen cambios de tripulación.
Hasta su prohibición, las narcolanchas se guardaban en almacenes y circulaban por la costa española sin problema, esperando a recoger la droga e introducirla rápidamente. En 2018 fueron calificadas como “género prohibido” y provocó que sus tripulantes tuvieran que ocultarlas y actuar cuando los agentes no pudieran interceptar la droga.
Por lo general, los petaqueros son jóvenes que aspiran a ascender de puesto en el negocio de la droga, según explican fuentes judiciales y policiales al medio citado. Mueven bidones de hasta 25 litros que llenan en gasolinas en las que tienen contactos, o bien lo hacen en varias tandas para no dejar demasiada evidencia. El negocio de los petaqueros es tan solo otra rama más del narcotráfico que las autoridades no pueden combatir por falta de herramientas legales.
Es difícil pillar a los petaqueros porque, cuando se les intercepta, lo único que transportan es combustible. Solo se les puede arrestar si se les consigue relacionar con una organización de tráfico de drogas. En 2019 se detuvo en La Línea de la Concepción a 15 personas acusadas de entregar combustible a los narcotraficantes. “Pero, como no se pudo acreditar el transporte de estupefacientes y solo teníamos gasolina, se quedó en nada”, señalan fuentes de la fiscalía.
En 2021, la Policía de Sanlúcar halló un zulo con 5.000 litros de combustible, placas dobladas de matrículas y armas. A esos petaqueros solo se les pudo imputar por falsedad documental y tenencia ilícita de armas. Por ello, se propone sancionarles por el simple hecho de transportar sin control un material inflamable, en coches, y almacenarlo en viviendas.