¿Qué se sabe de Emile? La desaparición del niño que tiene en vilo a toda Francia
El pequeño fue visto por última vez el sábado, mientras deambulaba en solitario por una calle de la pequeña aldea de Haut-Vernet, de tan solo 25 habitantes
De vez en cuando, algún caso hace contener el aliento a un país entero. En los últimos días, el pequeño Emile ha causado gran preocupación entre la sociedad francesa. El chico tiene tan solo dos años. Desde el pasado sábado, está desaparecido. Lo último que su familia supo de él es que había salido a jugar al jardín de la casa de sus abuelos maternos en la pequeña aldea de Haut-Vernet, de solo 25 habitantes.
Las localidades de proporciones tan reducidas tienen la particularidad de que, en mayor o menor medida, todos los vecinos tienen cierto grado de cercanía entre ellos. Por eso, es, en principio, más difícil perderse. No hay nadie que no sepa quién eres. Sin embargo, el infante no aparece por ninguna parte. La denuncia de la desaparición se hizo a las seis de la tarde. Una persona declaró haber visto al niño deambulando por una calle de la población en torno a las cinco y cuarto. Es la última pista que se tiene sobre su paradero.
Aunque, en un inicio, se había señalado que Emile estaba solo en la vivienda con sus abuelos, esto ha sido recientemente desmentido. El día de su extravío, en el interior del hogar se estaba desarrollando una reunión familiar que habría congregado a una decena de parientes. En un primer momento, se activaron los protocolos de peinado pormenorizado de la zona. La hipótesis que se barajaba era que pudiera haberse escapado y perdido por el monte adyacente al terreno donde jugaba.
Opciones abiertas
Este miércoles se abandonó esta fase de la investigación. Ahora, las actividades de búsqueda se dan en zonas puntuales y menos vastas. De momento, las autoridades no han descartado ningún escenario. La opción más probable, no obstante, parece ser la de que Emile salió de la finca y se desorientó en algún punto del bosque. De confirmarse esta posibilidad, sería virtualmente imposible que el muchacho siguiera con vida.
Otra opción que está sobre la mesa es la del secuestro. Pero no se tiene ninguna evidencia que apunte hacia ello. En los primeros días, se analizaron unas manchas de sangre que fueron encontradas en el automóvil de un vecino. Sin embargo, el resultado esclareció que se trataba, sin lugar a dudas, de sangre de origen animal, seguramente resultado de un atropello. Por lo tanto, es aún incierto el destino que ha corrido Emile. Pero las perspectivas no parecen ser demasiado buenas.