Qué es el Jubileo, el año santo cristiano que se celebra en Roma en 2025 y tiene origen judío
Las personas que lo realicen pueden pedir la indulgencia plenaria, el perdón de los pecados para ellos mismos o para sus seres queridos fallecidos.
Los años jubileos son eventos especiales que se producen cada 25 años. Son un momento de peregrinación, reflexión, oración, renovación, perdón de los pecados, penitencia sacramental, reconciliación, que se celebra en el 2025 en Roma, la capital de Italia.
El objetivo durante el Jubileo lo marca la Iglesia Católica, y permite a las personas que lo realicen pedir la indulgencia plenaria, el perdón de los pecados para ellos mismos o para sus seres queridos fallecidos.
El hecho de hacerlo cada 25 años está pensado para que cada generación lo viva al menos una vez en la vida. La palabra deriva del instrumento utilizado para indicar el comienzo, el yobel, un cuerno de carnero, cuyo sonido anuncia el Día de la Expiación (Yom Kippur). Una fiesta que se celebra anualmente pero adquiere un significado particular cuando coincide con el inicio del año jubilar.
Cómo se abre la Puerta Santa
El momento más esperado es la apertura de la Puerta Santa que marca el inicio del Año Santo. Tiene un significado especial: es el símbolo del paso que todo cristiano debe hacer del pecado a la gracia, pensando en las palabras de Jesús: «Yo soy la puerta» (Juan 10, 7), tal y como se puede leer en la Biblia.
Hay cuatro puertas principales o Puertas Santas en las basílicas mayores de Roma: San Pedro, San Juan de Letrán, San Pablo Extramuros y Santa María la Mayor. La Basílica de San Pedro es la primera en abrirse y las demás puertas se abrirán después. Una vez que acaba el año jubilar, se sella de nuevo hasta otros 25 años.
Hasta el año 1975, la Puerta Santa de San Pedro se tapiaba al final de cada Jubileo y se abría de nuevo al comienzo del siguiente. El papa daba los primeros tres martillazos a la pared, que luego derribaban unos albañiles. Desde el Jubileo del año 2000, el papa Juan Pablo II modificó el rito: el muro se desmonta los días anteriores a la apertura, se saca la llave para abrir la puerta de una caja y el papa empuja simbólicamente las puertas.
Un gesto con el que comienza oficialmente el Jubileo. Desde ese momento, la puerta está abierta durante todo el año para el paso de los peregrinos. El Año Santo concluye con la clausura de la puerta.
En el mundo existen otras Puertas Santas donde se puede recibir la indulgencia plenaria: en la Catedral de Santiago de Compostela, en la basílica de Santa María de Collemaggio en L’Aquila, en la Catedral de Notre-Dame de Québec,en la Catedral de Atri y una puerta santa en Nueva Delhi.
Durante el Año Santo se esperan peregrinos de todo el mundo, especialmente europeos por la facilidad de llegar andando a Roma realizando precisamente la peregrinación tradicional. Las cifras oficiales calculan 5 millones de peregrinos. Además de los actos religiosos, que son los que más mueven, hay actos culturales, musicales, de naturaleza…
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