¿Qué es el boicot a la fresa y por qué desde Alemania no quieren comprar la fresa española?
Una asociación alemana exige que el país deje de vender fresas de Huelva en los supermercados por la sequía en Doñana.
En el Parque Nacional de Doñana se ha instalado una sequía y su respectiva polémica desde hace meses. Por un lado, la sequía: el cambio climático, la falta de agua y la agricultura intensiva de la zona está secando el acuífero del que se nutre el parque nacional. Por otro, la polémica: una Proposición de Ley de los departamentos andaluces del PP y Vox propone, en este contexto de sequía, la legalización de más regadíos en el parque. En concreto, plantea que 1.600 hectáreas de suelos forestales pasen a ser zonas agrícolas “regables con agua superficial”.
La Proposición afecta a los términos municipales onubenses de Almonte, Bonares, Lucena del Puerto, Moguer y Rociana del Condado, pero no todas las hectáreas recibirán un título de suelo agrícola porque necesitarán ‘aprobar’ la supervisión de una oficina técnica que analizará caso a caso unas 650 explotaciones agrarias. La polémica, metida en este entramado agrario y medioambiental, ya ha traspasado las fronteras españolas.
Huelva es la mayor productora de fresas de Europa. Según datos recogidos por Huelva Información, la provincia andaluza cultiva el 30% de todas las fresas de Europa y es el mayor exportador mundial, pero la sequía de Doñana afecta directamente a su imagen y reputación porque se cree que, debido a la falta de licencias para obtener regadío legal, muchas fincas utilizan “agua robada” del parque nacional para alimentar al cultivo. Y aquí es donde Alemania entra en acción.
“El cultivo de fresas es particularmente intensivo en la región del Parque Nacional de Doñana, uno de los humedales más importantes de Europa y, por lo tanto, un punto crítico de biodiversidad. Debido a la extracción ilegal de agua por parte de la agricultura para el riego, especialmente para el cultivo de la fresa, Doñana —acompañada de una persistente sequía— se encuentra gravemente amenazada por la deshidratación”, señaló el Parlamento alemán (Bundestag) en un comunicado. Por esta razón, Berlín pretendía mandar a nueve diputados del Bundestag a " intercambiar información técnica” y aclarar la situación.
Pero el viaje alemán a Huelva ha sido cancelado este mismo lunes. La embajadora de Alemania en España, Maria Margarete Gosse, ha explicado que “la Comisión de Medio Ambiente, Protección de la Naturaleza, Seguridad Nuclear y Protección del Consumidor del Bundestag alemán ha decidido renunciar por el momento a su viaje a Andalucía largamente planeado”. “El objetivo del viaje era intercambiar información técnica sobre un tema que interesa a nuestros dos países, a saber, el cambio climático y sus consecuencias. Confiamos en poder reanudar este intercambio en el futuro”, ha concluido la embajadora.
Boicot alemán a la fresa de Huelva
Fruto de la polémica, la asociación alemana Campact ha emprendido una campaña para que los supermercados alemanes dejen de vender frutos rojos procedentes de Huelva para no contribuir a la sequía de Doñana. Los agricultores onubenses temen ahora que este tipo de iniciativas machaque la imagen de las fresas cultivadas en Huelva y reduzcan las exportaciones, y la semana pasada calificaron como “bulos” y como una campaña “insidiosa y dañina” la decisión de Campact.
“Ante algunas manifestaciones de apoyo a la iniciativa, apelamos a la responsabilidad de las autoridades y administraciones públicas para que actúen con prudencia en aras del interés general. Exigimos que cualquier comentario tome como base la información rigurosa y el conocimiento técnico”, denunciaron los agricultores.
Además, hay dudas en torno a la iniciativa alemana: algunos creen que es solo un movimiento de Berlín para que la fresa de Huelva, mucho más barata que la alemana, no compita con la de origen nacional. Según recoge 20 Minutos, el sector del fruto rojo en Huelva representa el 11,3% del PIB de la provincia y genera 100.000 puestos de trabajo directos y 160.000 indirectos.
¿Hay sequía en Doñana?
La situación del parque nacional ha enfrentado a la Junta y al Gobierno central. Mientras Andalucía asegura que la propuesta se dirige a la reordenación de las tierras, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, aseguró que “el negacionismo arruina el medio ambiente y corre el riesgo de arruinar las economías locales”. ¿Cómo de seco está el parque nacional?
De acuerdo con el último estudio de Science of the Total Environment, el 59% de las grandes lagunas de Doñana no se ha inundado desde 2013. El 80% de estas lagunas se secaron antes de lo previsto por las temperaturas y las bajas precipitaciones.
Por otro lado, el Copernicus, el Programa de Observación de la Tierra de la Unión Europea, asegura que los embalses de la cuenca se encuentran actualmente “a una baja capacidad del 25,5%, que es un 36,5% inferior a la media de los últimos 25 años”, y relaciona la sequía con “años consecutivos de altas temperaturas y escasas precipitaciones”.