Ediciones
Resultados
Síguenos en
Hola

ACTUALIDAD

¿Qué dice tu firma sobre tu forma de ser? Las características que tienen en cuenta los grafólogos

La grafología es una ciencia encargada de estudiar las firmas y la estructura de las mismas que, atendiendo a una serie de rasgos, revelan la personalidad de las personas.

¿Qué dice tu firma sobre tu forma de ser? Las características que tienen en cuenta los grafólogos
Pixabay

La firma de una persona es su seña de identidad en el mundo escrito. Es la manera que ha encontrado para plasmar su presencia, consentimiento en cualquier tipo de documento, como el de identidad. Esta, aunque pueda parecer un esbozo sin más, dice mucho de la persona que la traza. Por ello, se ha creado la grafología.

La grafología es una ciencia encargada de estudiar las firmas y la estructura de las mismas. En función de rasgos como la inclinación, el tamaño, la legibilidad o, incluso, el contenido de la misma, se puede deducir cuál es la personalidad del individuo que la realiza. O, al menos, algunas de sus cualidades.

El contenido

Uno de los objetos de estudio de la grafología es el contenido que incorpora cada persona a su firma. Es decir, si incluye el nombre y sus apellidos, sólo uno de los dos, si da más importancia a uno o si se la da a otro.

De acuerdo a los grafólogos, aquellos que dan más importancia a su nombre tienden a ser personas más independientes. ¿Por qué? Ello se debe a que no precisa sentirse representado por el valor que puede llevar su apellido y, por el contrario, se basta consigo mismo.

La curvatura de las letras

Otro rasgo de la firma es lo curvas que la persona que la realiza hace las letras. Si tiende a firmar con letras completamente rectas, es un individuo que tiende a presentarse como alguien correcto, disciplinado y firme. Mientras que aquellos que las hacen más bien curvas tienden a ser más bien amables, con gusto para la estética y más bien amigables.

¿Utilizas mayúsculas?

El tamaño que se escoge para las letras mayúsculas, si es que se utilizan, también hablan, de acuerdo a los grafólogos de la personalidad de alguien. Si estas son dos veces más grandes que las minúsculas, la persona seguramente tenga un autoestima estable. Y cuanto mayor tamaño vayan cobrando estas letras, mayor será el ego de la misma.

Si, por el contrario, no hace uso de una letra mayúscula, los expertos lo relacionan con valores como la humildad.

La legibilidad

Atendiendo a este rasgo, la grafología distingue entre tres tipos de persona:

  • Las personas que tienen una firma poco legible suelen presentar resistencia a la autoridad y resultan bastante desconfiadas.
  • Aquellas que la esbozan una firma legible tienden a ser más bien francos y sinceros.
  • También hay un punto medio, que comprende aquellos trazos en los que únicamente se entienden las iniciales. En ese caso, la persona suele tardar en coger confianza.

El grado de inclinación

El grado de inclinación que toma una firma revela también rasgos de la personalidad de cada uno. De la misma manera que ocurre con la escritura, aquellos que la inclinan hacia arriba suelen ser personas con ambición y que aspiran al éxito. Por el contario, aquellos que tienden a hacerla hacia abajo, se dice que presentan una personalidad apática y más bien depresiva.

En cualquiera de los dos casos, los rasgos se acentúan cuanto más se incline la firma. Aunque también puede ocurrir que se haga en sentido recto. Si ese es el caso, estamos ante alguien estable tanto mental como emocionalmente.

La presión

Otro rasgo que estudian desde la grafología es la presión que ejerce la persona con el bolígrafo sobre el papel. Si el trazo se resuelve de forma sutil, la persona seguramente sea fácilmente adaptable y tranquila. Si, por el contrario, lo realiza de manera más firme, estaremos ante alguien con mucho temperamento y de carácter autoritario.

El tamaño también importa

El tamaño de las letras que se emplea para realizar la firma también habla de la personalidad de cada uno. Cuanto más grandes sean estas, más extrovertida es la persona. Aunque también puede significar que estamos ante alguien tímido que busca atención.