Muere una mujer de 95 años tras ser reducida con un taser
Los hechos ocurrieron en Nueva Gales del Sur. La anciana, que vivía en una residencia, deambulaba por las instalaciones con un cuchillo de carnicería.
El pasado miércoles, las autoridades policiales de Australia se personaron en una residencia geriátrica después de recibir un aviso. Según la información que publica BBC, Clare Nowland, de 95 años, se encontraba deambulando por las instalaciones de la residencia, en Nueva Gales del Sur, con un cuchillo de carnicería a altas horas de la madrugada.
Dos agentes, junto con el personal de la residencia, se acercaron a ella para tratar de tranquilizarla. Fue entonces cuando uno de los policías le disparó varias descargas con una pistola taser (eléctrica). La mujer, ayudada por un andador, se acercó a ellos “lentamente”.
Según explicó un amigo de la familia, la anciana recibió dos golpes, uno en el pecho y otro en la espalda, antes de caer al suelo y sufrir una fractura de cráneo y una hemorragia cerebral grave. Añade, también, que era incapaz de mantenerse de pie sin ayuda: apenas pesaba 43 kilos y medía 1,58 metros. Después de varios días, la mujer ha fallecido.
“Con gran tristeza confirmamos el fallecimiento de Clare Nowland de 95 años. La Sra. Nowland falleció pacíficamente en el hospital, rodeada de familiares y seres queridos que han solicitado privacidad durante este momento triste. Nuestros pensamientos y condolencias permanecen con aquellos que tuvieron la suerte de conocer, amar y ser amados por la Sra. Nowland durante una vida que llevó caracterizada por la familia, la bondad y la comunidad”, anunció la policía australiana.
El policía, suspendido
El agente que la disparó, de 33 años y con doce de experiencia en el cuerpo, ha sido suspendido de empleo y está acusado de varios delitos. Entre ellos, lesiones graves por imprudencia y agresión. “Usaba un andador, pero tenía un cuchillo”, dijo el pasado viernes el subcomisario de la Policía de Nueva Gales del Sur, Peter Cotter.
La respuesta de las autoridades y del personal de la residencia ha sido fuertemente criticada y calificada de “desproporcionada”. De hecho, se ha solicitado que se abra una investigación estatal y que se haga público el vídeo, grabado por la cámara corporal de los policías. Según las directrices de las autoridades locales, las pistolas taser únicamente se pueden usar con personas mayores en “circunstancias excepcionales”.