Los coches que no podrán circular por la M-30
Los turismos con clasificación ambiental A de aquellos titulares que no estén empadronados ni abonen el Impuesto de Tracción Mecánica en la ciudad antes del 1 de enero de 2022 no pueden acceder al interior de la M-30.
Las cámaras que velan porque la M-30 sea una Zona de Bajas Emisiones (ZBE) ya han comenzado a funcionar de forma preventiva, más concretamente, hasta el 14 de enero de 2024. Se inicia, de esta forma, un período de preaviso para todos aquellos conductores de vehículos sin etiqueta que no estén empadronados ni abonen el Impuesto de Tracción Mecánica en la ciudad de Madrid antes del 1 de enero de 2022.
La prohibición de circular en el interior de la M-30, fijada en el interior de la misma, se hizo extensible, el pasado enero, a la propia vía de circunvalación. Hace varios meses, Automovilistas Europeos Asociados (AEA), publicó la lista completa de las 44 cámaras que se encargan de vigilar el acceso indebido de los vehículos sin etiqueta a la M-30 de Madrid. Estas son:
Mientras, para controlar el acceso de los vehículos sin etiqueta al interior de la M-30 se utilizarán 16 cámaras de los semáforos foto-rojo, las cuáles están ubicadas en:
Objetivo principal
Con todo ello, el Área de Movilidad y Medio Ambiente encabezado por Borja Carabante continúa extendiendo la estrategia medioambiental Madrid 360, que tiene como objetivo principal “limpiar” de la ciudad de Madrid aquellos turismos considerados más contaminantes: los de gasolina anteriores al año 2000, y los de diésel anteriores a 2006.
El hecho de que las cámaras se encuentren en “modo preaviso” no quiere decir que circular con estos turismos en la ZBE quede impune. De hecho, en la rueda de prensa posterior a la Junta de Gobierno, Carabante explicó que los 15 foto-rojos que ya multaban desde 2022, año en el que entró en vigor la Zona, lo seguirán haciendo también durante los próximos cuatro meses.
Por si esto fuera poco, los controles de agentes de Movilidad y de Policía Municipal también pueden ser objeto de sanción en caso de acceder a la zona sin un vehículo reglamentario. No obstante, no ocurrirá así con los usuarios que sean ‘pillados’ por las cámaras, al menos hasta el próximo 14 de enero de 2023. En su lugar, recibirán una comunicación meramente de carácter informativo.
Sanciones
Cabe destacar que el acceso no permitido a la M-30, al igual que ocurre con las ZBE de Especial Protección Distrito Centro -anteriormente Madrid Central- y Plaza Elíptica, suponía, hasta el 20 de marzo del año pasado, una infracción “leve” de tráfico y, por tanto, podía ser sancionada con 90 euros (45 euros si era por la modalidad de pronto pago).
Sin embargo, tras la modificación de la Ley de Tráfico, desde el 21 de marzo de 2022 se sanciona como infracción “grave” con multa de 200 euros, cien en el caso de que se abone con pronto pago. En relación a las sanciones, el delegado detalló que, actualmente, el Consistorio madrileño pone 100 multas diarias a vehículos sin etiqueta por acceder al interior de la M-30, cuando antes de la entrada en vigor de la ZBE eran 300, hecho que constituye un descenso superior al 60%.
Además, y tal como mencionan desde este organismo, desde la implantación de Madrid ZBE, los accesos de los turismos A en la vía de circunvalación se han reducido un 63,11% entre junio de 2019 y septiembre de 2023 (544.033 accesos frente a 200.686). Unas cifras que, a juicio de Carabante, “ponen de manifiesto que los ciudadanos, cuando se ponen en marcha unas restricciones de acceso como consecuencia de las ZBE y se les comunica, cumplen con su obligación”.
Particularidades
Ahora bien, lo que sí es cierto es que, tal y como está planeado en la estrategia, la restricción se ampliará en 2024 al exterior de la M-30 para aquellas personas que no están empadronados en la ciudad de Madrid. En 2025, se extenderá a todo el municipio con independencia de si el infractor es residente o no.
Desde ese año, tampoco podrán acceder ni circular por la capital los vehículos A que no sean turismos (camiones, furgonetas, motocicletas y ciclomotores) que hasta el 31 de diciembre de 2024 no tenían restricciones. La finalidad es que todo el término municipal se convierta progresivamente en zona de bajas emisiones, dando un pleno sentido al concepto de Madrid ZBE.