Lleva su Seat 600 a la ITV y las preguntas del técnico se hacen virales: “No hay botón para encender todas las luces a la vez”
Una influencer adquirió un Seat 600 de 54 años de antigüedad que llevaba sin pasar la ITV desde 2013.
Pasar la ITV, es por normal general, un proceso común en el que si se se ha realizado un correcto mantenimientos del vehículo y llevas todos los permisos y procedimientos técnicos al día, no debería haber razón alguna por la que no superes la prueba. No obstante, cuando la inspección técnica afronta un coche de 54 años, la revisión puede pasarse favorablemente pero también hay una alta probabilidad de sea desfavorable.
Un caso particular
La tiktoker Teresa Furquet, quien recientemente adquirió un Seat 600 E de 1970 que llevaba más de diez años sin pasar la ITV. El vehículo, en aparente buen estado desde fuera, llevaba 13 años sin pasar la revisión técnica, por alguna razón que se desconoce. Tras adquirir el coche, solo 10 días antes la tiktoker decidió devolverle la legalidad a su nuevo coche, por lo que se embarcó en la aventura de pasar la ITV a su nueva adquisición. “Vamos a pasar la ITV a mi coche clásico de 54 años”, explica la joven. “Me lo compré hace una semana y lleva 10 años sin pasar la ITV. A ver si no tenemos ningún problema”, señalaba en el vídeo.
¿Cómo es pasar la ITV a un coche con 54 años de antigüedad?
Lo más llamativo de la revisión técnica, tal y como se refleja en el vídeo, fueron las preguntas que el técnico le realizaba a la tiktoker. Cuando el técnico le pidió que activara los limpiaparabrisas con agua, tuvo que explicar: “¿Agua? No tiene”. El sistema de pulverización de agua al parabrisas no era obligatorio en la época y el 600 en cuestión no lo equipaba. Tampoco lo era el sistema de cuatro intermitentes. “No hay botón para encender todas las luces a la vez”, expresa Teresa en el vídeo. Por si esto fuera poco, es necesario mencionar que este vehículo salió de fábrica sin cinturones de seguridad, porque fueron instalados posteriormente.
El 600 fue el primer coche de muchos ciudadanos españoles en los años ‘60. Es un icono que mueve a miles de entusiastas que añoran aquella época y un artículo de colección en la cultura automotriz nacional, emblema del desarrollismo de la época. El vehículo que adquirió Teresa está matriculado en Badajoz en el año 1970. La influencer lo adquirió, según menciona en su cuenta de TikTok, para utilizarlos como como coche en su boda. Finalmente, el coche logró pasar la ITV, vuelve a ser legal para su uso en la vía pública y pudo emplearlo en el día de sus boda, ya que la influencer ya se dio el “Sí, quiero”.
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