Le despiden por sus repetidas pausas en el baño y preparan el ataque legal con minutaje cronometrado incluido
Un trabajador alemán fue acusado de pasar 42, 46 y 48 minutos en el baño durante tres días de septiembre.
¿Se puede despedir a alguien por hacer pausas para ir al baño excesivamente largas? ¿Quién considera que una pausa es excesivamente larga? Este hecho ha sucedido en Alemania, donde un trabajador recibió una carta de despido acusado de ausentarse durante un tiempo excesivo, 42, 46 y 48 minutos en el baño durante tres días de septiembre, concretamente.
Ir al baño es una necesidad humana básica, y no puede prohibirse ni limitarse de forma generalizada. Ir al baño se considera una breve interrupción del trabajo, similar a beber agua rápidamente o tomar un breve descanso del ordenador. Un hábito en este caso del despido fisiológico inevitable, que no sólo es un asunto privado, sino que hombres y mujeres tienen necesidades diferentes en este sentido por causas biológicas.
Lo que dice la Ley de Tiempo de Trabajo y pausas en Alemania
La Ley de Tiempo de Trabajo alemana (artículo 4) define claramente las pausas para descansar (por ejemplo, una pausa de 30 minutos tras 6 horas de trabajo), pero las pausas para ir al baño no se incluyen en estas pausas.
Sí se consideran pausas remuneradas, lo que significa que los trabajadores no tienen que fichar la salida ni recuperar el tiempo dedicado a esas pausas habituales para ir al baño. Suelen ser consideradas tiempo de trabajo, precisamente por su brevedad.
Cuándo una pausa para ir al baño se convierte en un abuso del tiempo de trabajo no es algo que esté regulado ni establecido. No hay tablas dedicadas a establecer lo necesario, lo urgente, lo permitido o cuándo es excesivo el tiempo que pasa en el excusado.
Si no hay razones médicas que digan lo contrario, las visitas habituales no tienen por qué interferir en el trabajo. Tal y como cuenta el abogado y jurista especializado Jens Usebach, del bufete JURA.CC, “extender deliberadamente el tiempo en el baño para actividades privadas como leer, usar el teléfono móvil durante mucho tiempo u otras actividades propias de un descanso puede considerarse un incumplimiento del deber. En tales casos, ya no se trata de una necesidad básica, sino que el empleado está obteniendo tiempo libre de forma fraudulenta“.
Hace poco, una sentencia del Tribunal Laboral de Colonia estableció que incluso las pausas diarias para ir al baño que superen los 30 minutos no justifican una reducción salarial. Sin embargo, si el uso del baño excede con creces lo necesario o se produce de forma sistemática, podría alegarse robo de tiempo.
Por tanto, ¿es legal despedir a un empleado por tomarse descansos para ir al baño excesivamente largos? En casos extremos, sí. Eso sí, todo debe estar documentado. Solo tras reiteradas faltas de cumplimiento del deber, después de una advertencia pertinente, puede considerarse el despido.
Un certificado médico puede ser útil para demostrar que las pausas más largas para ir al baño son necesarias y no se deben a su propia responsabilidad. Si las pausas prolongadas para ir al baño se deben a razones físicas, no debe ser penalizado por ello; un despido fulminante sería claramente injustificado.
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Los responsables de grupos deben aceptar que las pausas para ir al baño forman parte de la jornada laboral y no regularlas en exceso. Una prohibición general o normas rígidas serían ilegales, ya que vulneran los derechos personales de los empleados, como poner un tiempo por visita al baño. En caso de sospecha de mal uso del tiempo: primero debe haber una conversación, luego una advertencia. Controlar las visitas al baño con tarjeta de registro de entrada y salida, o cámaras de control de tiempo en la misma línea es ilegal en Alemania.
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