Las profesiones que pueden reducir su jornada laboral por las altas temperaturas
Estos son: operarios de limpieza, montadores, barrenderos, camareros, obreros y jardineros. El calor extremo puede causar efectos de distinta gravedad, desde erupciones en la piel a calambres, deshidratación o golpes de calor.
La llegada del verano marca el inicio de una temporada marcada por altas temperaturas intensas y prolongadas durante varias jornadas consecutivas. Estos fenómenos climáticos están recogidos por una norma aprobada por el Gobierno en mayo de 2023 cuyo objetivo principal es buscar la “protección de los trabajadores que trabajen al aire libre”.
Las propias empresas serán las responsables de establecer cuáles son las actividades que quedarán vetadas durante las olas de calor y cuáles no. De la misma manera, el Gobierno responsabilizará a las mismas si durante la jornada laboral y bajo su criterio se produce algún accidente relacionado con las temperaturas.
Plan de prevención de riesgos laborales
No están prohibidos todos los trabajos al aire libre durante las olas de calor, sino aquellos que supongan un riesgo para la plantilla. En concreto, quedarán prohibidas cuando la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) active la alerta naranja o roja siempre que las empresas afectadas hayan determinado que las medidas preventivas previstas ya habilitadas no garanticen la protección de las personas trabajadoras.
En caso de poder modificar o reducir la jornada y minimizar esos riesgos no hará falta suspenderla. En la actualidad, toda empresa está obligada a tener un plan de prevención de riesgos laborales que, entre otros, debe incluir una evaluación de todos aquellos peligros de la actividad de dicha empresa.
Los trabajos con más riesgo
Por si esto fuera poco, tendrá en cuenta tanto las características individuales como las tareas que se desarrollan. Con estos esfuerzos oficiales se pretende evitar nuevas muertes en los sitios de trabajo. Y es que, según los datos publicados en enero por el sistema de monitorización de la mortalidad diaria (MoMo), casi 6.000 personas murieron en 2022 como consecuencia de las olas de calor.
Con todo ello, los trabajos cuyos empleados tienen más riesgo de ver en peligro su integridad física por culpa del calor son:
¿El motivo? Tienen que realizar un importante esfuerzo físico, muchas veces sometidos a altas temperaturas. El calor extremo puede causar efectos de distinta gravedad, desde erupciones en la piel a calambres, deshidratación o, en el peor de los casos, golpes de calor, que son potencialmente mortales ya que la temperatura corporal supera el nivel crítico de 40 grados centígrados.
No hay una temperatura máxima establecida por la ley
No hay una limitación de temperaturas recogida en el Real Decreto 486/1997 por el que se establecen las disposiciones mínimas de seguridad y salud en lugares de trabajo. Es decir, no existe una temperatura máxima establecida por la ley.
Pese a ello, es conveniente tener en cuenta que el calor extremo aumenta hasta un 9% las posibilidades de accidente laboral, además de que deben tenerse en cuenta los riesgos que suponen sufrir golpes de calor al trabajar expuesto a las altas temperaturas, que puede llegar a provocar la muerte del trabajador en un 25% de los casos.
Temperatura máxima y mínima en trabajos en el interior
Ahora bien, sí indica cuál es la temperatura máxima y mínima permitida en el trabajo, pero refiriéndose únicamente a trabajos en el interior:
Trabajo de las comunidades autónomas
Las comunidades autónomas han comenzado este verano a realizar sus propios esfuerzos para evitar los efectos negativos del calor del trabajo. Es más, en el Ministerio de Trabajo adelantaron hace algunas semanas que estaban próximos a lanzar campañas de inspección para vigilar las actuaciones de las empresas frente al calor extremo.
En Madrid, en verano de 2022, un operario municipal de limpieza de Madrid murió mientras trabajaba en el distrito de Puente de Vallecas. La víctima, de 60 años, fue trasladada en estado grave al hospital Gregorio Marañón tras sufrir un golpe de calor en la avenida de San Diego, donde fue atendido por los facultativos de Samur-Protección Civil a mitad de la tarde. Cuando le tomaron la temperatura corporal, estaba a 41,6 grados, por lo que rápidamente procedieron a aplicarle hielo y suelo salino frío, además de taparle con una manta de hipotermia, algo que fue insuficiente para salvar su vida.