‘La Vanguardia’: así fue la trampa que le habrían preparado al padre de Lamine Yamal

Una trampa. Así es como La Vanguardia cree que el padre de Yamine Lamal, Mounir Nasroui, habría acudido supuestamente engañado al parking donde sería apuñalado pensando que iba a solucionar el incidente de media tarde del miércoles que desembocó en su ingreso en la UCI del Hospital Can Ruti.

Hasta ahora, se han detenido a cuatro hombres, de nacionalidad española, a uno de ellos se le ha decretado prisión provisional, comunicada y sin fianza, mientras que los otros tres detenidos han quedado en libertad con medidas cautelares tras ser acusados de intento de asesinato con al agravante de alevosía. No se descarta que este viernes se detenga a un quinto implicado en la pelea.

Para dos de ellos, el juzgado de Mataró, en funciones de guardia, ha decretado que deberán personarse dos veces al mes en los juzgados, la retirada del pasaporte, la prohibición de salida del territorio y de acercarse a menos de 300 metros y de comunicación con la víctima durante un año. Para otro de los detenidos ha decretado la prohibición de comunicación y alejamiento a menos de 200 metros de la víctima durante seis meses.

Dos días después de su ingreso, Mounir Nasroui ha recibido el alta médica en el Hospital Germans Trias i Pujol de Badalona en la tarde de este viernes. Desde el centro hospitalario, el padre de la estrella del Barcelona lanzó un mensaje tranquilizador, asegurando que se encontraba mejor. Según fuentes de la familia, está estable y con una buena evolución. Tras salir del hospital, Mounir ha atendido TardeAR, asegurando estar bien tras recibir el alta. Preguntado por lo ocurrido, ha declarado que “pasa lo que tiene que pasar, cuando hay sinvergüenzas no podemos hacer nada”. Tras lo ocurrido, Mounir ha asegurado que está asesorado por su equipo legal que ahora estará “alejado de las cámaras”.

Así fue ‘la trampa’

Los acusados, que supuestamente serían todos miembros de una misma familia del barrio de Rocafonda, habrían tendido una supuesta trampa que fueron preparando por la tarde a Mounir Nasraoui. Según la versión de La Vanguardia, que cita entre sus fuentes a los Mossos, serían padre, hermanastro y abuelo, y un amigo de ellos.

Ninguno tendría antecedentes, y estarían en torno a los 25 y 30 años. Tras pasar a disposición judicial hoy se conocerán los cargos de los que se les acusa.

Tras el altercado de las tres de la tarde, se habrían citado con el padre del futbolista en un parking de la zona para “hacer las paces”, tal y como le dijeron. Pero se presentaron con armas blancas (no está claro si sólo cuchillos y un destornillador también).

Una vez que estaban todos allí, le rodearon, golpearon, patearon y apuñalaron, según ha declarado Nasraoui a los Mossos, que son los encargados de la investigación.

“Suerte que apareció un amigo de mi padre, si no, lo matan”, habría relatado el jugador a un directivo del Barcelona, según La Vanguardia, tras visitarle en el hospital de Can Ruti, de donde hoy ha salido después de recibir el alta médica.

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