La tragedia de Londres que recuerda mucho al incendio de Valencia: así se incendió la torre Grenfell

Este jueves un incendio en un edificio de 14 plantas de la avenida Maestro Rodrigo en Valencia ha dejado diez víctimas mortales y una decena de personas desaparecidas, en cuya búsqueda trabajan los bomberos. De los heridos, nueve personas fueron dadas de alta y el resto, aún permanecen ingresados.

Los cuerpos sin vida de esas cuatro personas fueron hallados gracias a la labor del dron Matrice 300 RTK, desplegado por la Unidad Militar de Emergencias (UME). Todas las miradas ahora se centran en el material con el que fue revestido el edificio, cuyas viviendas llegaron a tener un precio de salida de unos 300.000 euros en 2008. En este caso, se trata del poliuretano y en su marca comercial alucobond, un material inflamable, según confirmó la ingeniera Esther Puchades, perito del edificio.

Precisamente por el revestimiento con este tipo de material, de forma inevitable, muchos echan la mirada hasta junio de 2017. En aquel año, en Londres, concretamente en la torre Grenfell, ubicada en North Kensington, se produjo un incendio en este edificio de 120 viviendas sociales que dejó 72 víctimas mortales y 74 personas heridas, después de que la torre quedara completamente calcinada por las llamas.

El patrón de la propagación del fuego, fue muy similar al del edificio de la capital valenciana. El edificio londinense fue revestido por un material de baja calidad. Las investigaciones que se llevaron a cabo, determinaron que los promotores de la vivienda donde se desató el fuego utilizaron polietileno, plástico que deriva del etileno, un gas incoloro extraído del petróleo o del gas natural.

Compuesto prohibido por la Unión Europea

La última reforma de este edificio, cuya construcción se llevó a cabo en 1974, se produjo entre los años 2015 y 2016. De las primeras cuatro plantas, dos de ellas se reconvirtieron a uso residencial, de modo que el ascendió a 127 el número de viviendas y a 227 las habitaciones. Seis de los nuevos pisos tenían cuatro dormitorios cada uno.

Durante ese periodo, el edificio recibió nuevas ventanas y nuevos revestimientos. El compuesto utilizado para el revestimiento de la torre Grenfell, estaba terminantemente prohibido en la Unión Europea para llevar a cabo rehabilitaciones de inmuebles, dado su potencial inflamable, según reconoció el que era ministro de Economía, Philip Hammond. “Entiendo que el revestimiento en cuestión, prohibido en Europa y Estados Unidos, está prohibido también aquí (en Reino Unido)”, dijo por aquel entonces.

Actualización de la normativa europea

En declaraciones recogidas por Europa Press, el catedrático del departamento de Ingeniería Civil de la Construcción y de Proyectos de Ingeniería Civil de la Universitat Politècnica de València, Antonio Hospitaler, fue un incendio prácticamente idéntico al de Valencia, con el denominado ‘efecto chimenea’. “Fue un incendio que se propagó por fachada y eso causó una actualización de la normativa europea al respecto”.

Hospitaler también se pronunció sobre un posible derrumbe del edificio valenciano en declaraciones a la mencionada agencia. “El hormigón aguanta bastante el fuego, tiene buena resistencia. Lo que pasa es que no hay que entrar al edificio enseguida, hay que esperar porque el hormigón puede colapsar después, porque tiene un proceso físico-químico dentro que hace que se deteriore con el tiempo”.

Con respecto a Reino Unido, un reportaje publicado por The New York Times reveló en una investigación publicada en 2019, dos años después de la tragedia, que hasta 500 edificios contaban con el mismo revestimiento que el Grenfell. En cuanto a las medidas adoptadas por Downing Street, el Ejecutivo liderado por Theresa May, destinó por aquel entonces 400 millones de libras, unos 468 millones de euros, para ayudar a las autoridades locales a retirar el revestimiento de aproximadamente 150 edificios de vivienda pública.