La línea más transitada de Metro de Madrid cierra durante 6 meses en estas fechas: consulta las estaciones afectadas

La movilidad por Madrid se verá alterada debido al cierre temporal de la Línea 6 de Metro, la más frecuentada por los madrileños. Este cierre se prolongará durante un período de seis meses debido a las obras de renovación integral que se están llevando a cabo para implementar avances tecnológicos y mejorar la experiencia de los usuarios. Además de la renovación de la Línea 6, también se llevarán a cabo otros proyectos clave, como el desarrollo del nuevo intercambiador de Conde de Casal y la prolongación de las líneas 5 y 11 del suburbano.

Por otro lado, la Comunidad de Madrid ha informado sobre el progreso de la ampliación de la Línea 3, que conectará Villaverde Alto con El Casar en Getafe. Este avance beneficiará a más de un millón de habitantes en los municipios del sur, reforzando las alternativas de transporte en una región clave para la movilidad metropolitana.

Línea 6 de Metro de Madrid cerrada

La renovación de la Línea 6 de metro de Madrid, que registra una media de 618.000 pasajeros diarios, tiene como principal objetivo modernizar su infraestructura con una inversión de 129 millones de euros. Entre las mejoras que se prevén, incluye un sistema de de conducción automática y la instalación de mamparas transparentes en los andenes. De esta manera, estas mejoras permitirán reducir los largos tiempos de espera por cada tren, así como reducir el consumo energético.

Las obras se realizarán en dos fases: la primera se llevará a cabo entre junio y septiembre de 2025 en el arco suroeste, entre Moncloa y Méndez Álvaro. En la segunda, de septiembre a diciembre, se verá afectado el tramo noreste, entre Moncloa y Legazpi.

Por tanto, durante estos seis de meses de cierre, los usuarios deberán recurrir a alternativas de transporte, como las líneas de autobuses y otros tramos del Metro. Las autoridades oficiales aseguran que estas mejoras supondrán grandes beneficios a largo plazo, así como la modernización de los de las infraestructuras. Adicionalmente, se prevé una campaña informativa para orientar a los usuarios sobre las rutas alternativas disponibles.

Nuevo intercambiador de Conde de Casal

Las obras del nuevo intercambiador de Conde de Casal, comenzarán en el primer trimestre de 2025. Este proyecto mejorará significativamente la conexión entre la Línea 6, el corredor de la A-3 y las líneas de autobuses urbanos e interurbanos que operan en la zona. Con una media de 65.000 pasajeros diarios, este punto de servicio puede constituirse como un centro neurálgico del transporte de la capital.

La planificación de este intercambiador se remonta a varias décadas atrás, pero las dificultades económicas y distintas situaciones adversas no han permitido el visto bueno del proyecto, hasta ahora. El desarrollo de esta infraestructura se integrará con la prolongación de la Línea 11, consolidándose como una solución clave para mejorar el tránsito en el eje de la A-3. Además, también dispondrá de zonas comerciales y servicios modernos para mejorar la experiencia del usuario.

Prolongación de las líneas 5 y 11

Otro punto destacado en el plan de 2025 es la prolongación de la Línea 5, que conectará Alameda de Osuna con las terminales T1, T2 y T3 del Aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas. Con un presupuesto de 209 millones de euros, este proyecto permitirá una conectividad directa entre el centro de la capital y el aeropuerto, logrando beneficiar a miles de usuarios y trabajadores que se mueven diariamente por estas áreas urbanas. Por su parte, la ampliación de la línea 11 hacia Conde Casal supone un paso importante para completar la red de transporte metropolitana, que incrementará en 12.000 pasajeros diarios, consolidando la línea como una de las más importantes dentro del sistema.

Repercusión para los usuarios

Pese a que las obras, supondrán una serie de avances importantes en la movilidad de los usuarios por la Comunidad de Madrid, también traerán algunos inconvenientes temporales. Los usuarios deberán adaptarse a desvíos, cierres parciales y cambios en las rutas habituales. Sin embargo, las autoridades han informado que se pondrán a disposición del ciudadano algunas alternativas, con el fin de minimizar el impacto, lo máximo posible. Entre las medidas destacan el refuerzo de las líneas de autobuses y el aumento de frecuencias en otros tramos del Metro, y también se ha puesto en marcha un programa de coordinación con otras administraciones locales para optimizar el tránsito durante las obras.

De esta manera, la red de transporte de Madrid se orienta hacia un futuro más moderno y accesible, en el que los usuarios disfruten de todas las comodidades posibles a la hora de utilizar el transporte público, reafirmando su papel como eje vertebrador de la movilidad en la región.

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