La isla privada española situada en el Mediterráneo que ahora se puede visitar

La isla Barón de Murcia, también conocida como Mayor (es la más grande de la comunidad autónoma) tiene origen volcánico y, a pesar de ser propiedad privada, ya se puede visitar. Allí se encuentra un palacio estilo mudéjar en el que un noble, el antiguo propietario de la isla, celebraba grandes fiestas.

Ahora es posible viajar hasta ella gracias a la empresa Flippa Boat, que llegó a un acuerdo con la actual propietaria de la isla (la familia de Ana María Navarro) para organizar dos excursiones mensuales en barco desde La Manga. El trayecto dura dos horas y se puede pasear por ella, ver por fuera el palacio y subir a una la torre que hay en uno de los conos volcánicos. El precio de la excursión es de 48 euros por persona.

Sobre la isla vuela la leyenda de una princesa rusa que acudió a una de esas fiestas. El barón de Benifayó se enamoró de ella, y los padres de la joven la entregaron al barón para el matrimonio. Sin embargo, la princesa nunca le correspondió, pero quedó confinada en la isla y acabó muriendo de pena. Por ello, se dice que todavía se puede ver el fantasma de una bella joven paseando por la orilla de la isla Barón.

Pero, por otro lado, la isla también tiene valor ambiental: posee un bosque de palmitos y, durante los años 80, se detectó la presencia de muflones, que se dice que fueron introducidos de forma ilegal en el territorio para la práctica de la caza.

La isla tiene una superficie de casi 94 hectáreas y se encuentra muy cerca de La Manga. Desde el siglo XIX perteneció a Julio Falcó, el barón que se enamoró de la princesa rusa. Falcó, de la casa italiana de Saboya, nació en Milán en 1834 y llegó a España acompañando a Amadeo de Aosta, futuro Rey Amadeo de Saboya.

Las leyendas también cuentan que Falcó fue un hombre liberal y aventurero que tuvo varias amantes y relaciones hasta que murió en San Pedro del Pinatar (Murcia) en 1899, cuando tenía 65 años.