La historia del hombre que ha probado 50.000 cervezas diferentes

Un hombre nacido en la ciudad inglesa de Sheffield, ha alcanzado un récord increíble, llegando a probar 50.000 cervezas diferentes. Sí, has leído bien, ¡50.000 cervezas! Aunque parezca increíble, este amante de la cerveza ha dedicado su vida a explorar el vasto y espumoso mundo de esta bebida tan popular en todo el mundo.

La cerveza es considerada, no solo una bebida, si no una tradición que une a personas de todas partes. Desde las cervezas clásicas que conocemos en España hasta las más exóticas del mundo, cada una con su propia historia y sabor único. Pero este hombre ha traspasado el límite, y ha recorrido un camino lleno de todo tipo de cervezas, demostrando que para los románticos de esta bebida siempre hay una nueva variedad por descubrir y disfrutar.

Desde la primera hasta la 50.000

En los pasillos de la Universidad de Cardiff, a finales de los años 70, comenzó esta historia de amor entre la cerveza y Andy Morton. En aquel entonces, Andy solamente tenía acceso a una cerveza insípida que se servía en el centro de estudiantes, lo que le hizo iniciar su búsqueda de una mejor calidad llevándole a pubs locales, donde se enamoró de los sabores de las cervezas de barril. Estas le ofrecían un sabor y una frescura que captó su interés y lo llevó a explorar aún más el gigantesco mundo de la cerveza.

Ya de vuelta en su ciudad natal, Sheffield, después de la universidad, empezó a asistir a festivales de cerveza y, en 1985, ya anotaba las cervezas que iba probando. Asistía a tres o cuatro festivales al año, lo que le llevó a introducirse en el hobby del “beer ticking”, que consiste en marcar las cervezas que se beben en una lista.

“Puedo probar desde un puñado hasta 16 o 17 medias pintas”

En el 2004, asistió a 109 festivales de cerveza, eventos que generalmente duran dos o tres días. Durante estos eventos, Andy cuenta que le permitieron probar hasta 17 medias pintas por festival. Además de esto, registra todas las cervezas de barril que toma en los pubs, anotando el nombre, la fecha, el lugar, el precio, la cervecería y el porcentaje de alcohol, todo ello sin puntuarlas.

Pero, con el tiempo, su consumo fue moderando. “Hay que tener cuidado de no beber demasiado y saber cuándo se ha bebido suficiente. No se trata de emborracharse, sino de beber cerveza”, comenta Andy. Ahora, consume menos de cuatro pintas al día, prefiriendo las cervezas de barril que cuentan con un porcentaje de alcohol más bajo.

Hasta la fecha, ha llenado unos 250 cuadernos con sus registros de cerveza. Y en cuanto a sus preferencias, tiene un paladar amplio, aunque no rechaza ninguna cerveza. Entre sus favoritas se encuentran la Brains Dark de Cardiff y la Wadworth 6x.

La cerveza número 50.000

Recientemente, Andy ha alcanzado un hito monumental en su afición: la degustación de su cerveza número 50.000 en un micropub de Sheffield. Este logro fue celebrado por los bares locales, creando una cerveza especial para la ocasión.

Este hito refleja no solo su pasión por la cerveza, sino también su amor por los números y las estadísticas, una herencia de su carrera como contable. En promedio, marca unas 2000 cervezas nuevas cada año. Este año, alcanzar la cifra de 50.000 fue un momento especial en su viaje cervecero. “Fue agradable llegar hasta ahí”, reflexiona. Y así, su pasión por la cerveza artesanal continúa, siempre en busca de nuevos sabores y experiencias para añadir a su vasta colección.

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