La gran línea roja de la DGT que comienza a aparecer en las carreteras españolas
Presente en carreteras como la A-355 en Málaga, alerta a los conductores de la prohibición de adelantar durante el tramo comprendido por la marca.
La Dirección General de Tráfico (DGT) continúa con la aplicación de medidas para evitar más accidentes de tráfico en las carreteras españolas. La última novedad al respecto, consiste en la aplicación de una línea continua de color rojo, que se puede apreciar en muchas vías del país.
Una de ellas es la A-355, ubicada en la provincia de Málaga, carretera autonómica andaluza que une las poblaciones de Cártama y Marbella. Conocida como la ‘carretera del miedo’, debido a los diez decesos registrados en un tramo de diez kilómetros, en ella se ha introducido la marca vial de color rojo para alertar a los conductores de la prohibición de adelantar durante el tramo comprendido por la marca.
Así informó al respecto la Consejería de Fomento de la Junta de Andalucía. “Una gran línea roja remarca la prohibición de adelantamientos en la carretera A-355 de Coín (Málaga)”. Una carretera que cuenta también con radares pedagógicos y carteles digitales. De este modo, la línea continua roja sustituye a la de color blanco, para remarcar más la prohibición.
Sobre las estadísticas de accidentes de tráfico, uno de cada tres fallecidos en accidentes de tráfico en 2023, en la Unión Europea, supera los 65 años. En España, de las 1.145 personas que murieron en las carreteras interurbanas, el 28% eran mayores de 65 años, según el Observatorio Nacional de Seguridad Vial de la Dirección General de Tráfico (DGT).
Otras señales de tráfico
Estas marcas de color rojo no son las únicas que introdujo la DGT para reducir el número de accidentes en las carreteras. También destacan otras como las líneas verdes, acompañadas de señales verticales, indican a los conductores que circulan por una carretera sometida a controles de velocidad.
Cabe mencionar, por otro lado, los “dientes de dragón”, que hacen más estrecha la carretera y, por ello, hace que los conductores reduzcan la velocidad. Las ‘líneas de borde quebradas’, por ejemplo, suponen una señalización en forma de zigzag para alertar de la llegada de un paso de cebra. En el caso de estas dos, se colocaron en la N-122 a su paso por Nava de Roa (Burgos).