La DGT señala las multas más comunes en verano: si las cometes, las sanciones son de hasta 500 euros

El verano y la llegada de las vacaciones es una de las temporadas en las que más desplazamientos se producen por carretera y, como no puede ser de otra forma, cuando más multas se ponen. De hecho, según el portal Flexicar, se imponen hasta 10.000 sanciones cada día durante estos meses del año. En la mayoría de casos, el importe de la multa va desde los 80 hasta los 500 euros.

La Dirección General de Tráfico (DGT) suele renovar habitualmente su normativa, por lo que resulta imprescindible estar al día de estas para cumplirlas en todo momento y evitar la temidas multas. El exceso de velocidad, el uso del teléfono móvil mientras se conduce o haber consumido alcohol o drogas antes de conducir son las infracciones más comunes que se suelen cometer al volante. Sin embargo, hay otras menos conocidas que también pueden dar lugar a un incumplimiento de la normativa. A continuación, comentamos las más frecuentes:

Las chanclas, un calzado peligroso al volante

La playa y la piscina son uno de los lugares donde más tiempo pasa mucha gente en verano y las chanclas son el calzado por excelencia. Aunque no es algo cómodo para la conducción, hay personas que optan por llevarlas. Sin embargo, aunque en el imaginario popular se crea que está prohibido, la realidad es que no está específicamente tipificada como una infracción en el Reglamento General de Circulación.

Si bien es cierto, algunos agentes de tráfico podrían considerarlo como una conducta sancionable, pues la DGT establece como ‘sancionable’ aquellas prácticas que puedan dificultar la conducción. En el caso de las chanclas, estas podrían limitar el uso de pedales y por ello se reduce la capacidad de reacción del conductor. En todo caso, lo mejor es utilizar calzado cómodo y seguro durante la conducción.

¿Se puede conducir descalzo?

Al igual que ocurre con el uso de las chanclas al volante, conducir sin calzado es otra de las prácticas muy sancionadas, aunque no está específicamente recogido en el reglamento. Esto no es sancionable como tal, pero hacerlo puede no garantizar totalmente que el conductor pueda tener el control absoluto del coche, ya que podrían resbalarse los pies de los pedales.

Conducir sin camiseta puede ser motivo de sanción

En todo caso, la multa podría ser de máximo 80 euros, sin embargo, esto tampoco se recoge de manera expresa. No obstante, la norma sí recoge la posibilidad de sancionar en caso de que no se disponga de los elementos necesarios y pueda estar en riesgo el piloto. Es decir, no llevar nada en la parte superior del torso podría generar fricciones y molestias con el cinturón de seguridad y ser un motivo de distracción. Además, en caso de accidente podría llegar a ser abrasivo para la piel.

El codo por la ventanilla, una acción muy común entre los conductores

Aunque esto era más común en el pasado, a día de hoy también pueden verse a algunos conductores en esta posición. Esto puede llegar a ser motivo de sanción, ya que al llevar el brazo apoyado se circula con una sola mano sujetando el volante, por lo que se tiene menos control de este, cuyas consecuencias en un accidente podrían llegar a ser mucho más graves. En estos casos las multas podrían llegar a ser de 80 euros.

Otro punto a tener en cuenta es la forma en la que se colocan las maletas en el coche, pues llevar demasiados bultos en la parte delantera puede conllevar un alto riesgo en caso de accidente. Las maletas y mochilas deben ir en el maletero, bolsas más pequeñas pueden ir debajo de los asientos, nunca encima ni en el suelo. Esto podría llegar a tener una sanción de hasta 500 euros y 4 puntos del carnet.

La colilla por la ventanilla del coche

Esta infracción conlleva una de las sanciones más altas al volante, con multas de 200 euros y la retirada de cuatro puntos del carnet. Ya fumar en el coche puede ser motivo de sanción porque afecta a las facultades del conductor, pero además tirar la colilla puede tener una sanción doble: por un lado, porque se pone en peligro al resto de conductores y por otro, porque las colillas son el principal motivo de incendio en verano. Por ello, siempre es recomendable tener un cenicero a mano en el coche.

Otras distracciones muy comunes al volante

Las distracciones al volante pueden ser infinitas, por ello es recomendable tratar de evitarlas lo máximo posible para así no tener ningún riesgo en la carretera. Entre las más comunes destaca las distracciones con el GPS. Mirar mientras se conduce este dispositivo o el teléfono móvil puede conllevar hasta 200 euros de multa y 3 puntos del carnet de conducir. La programación antes de salir o activar los comandos por voz es una buena opción para evitar multas y, sobre todo, accidentes.

Otra distracción muy habitual es beber agua al volante, lo que también supondría una multa de 200 euros y una reducción de dos puntos del carnet. En este caso también está prohibido en muchas jurisdicciones, pues apartar la vista de la carretera o retirar una mano del volante para beber agua puede ser un gran riesgo. Lo mejor: parar cada cierto tiempo para estirar las piernas, hidratarse y despejar un rato la mente.

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