Gana 180 euros por dos trabajos puntuales y acaba condenada a pagar 600 veces sus ingresos: “Lo percibo como acoso administrativo”
La víctima tuvo que viajar a la sede centra de Bruselas para averiguar quién le había dado de alta en la seguridad social.
Una mujer ha sido condenada a pagar 120.000 euros por por supuestamente trabajar como autónoma y no pagar las cotizaciones correspondientes. La mujer relaciona la situación con el acoso que ha recibido por parte de la actual pareja de su expareja, quien la llegó a difamar frente a 80 personas.
Julie, el nombre ficticio de la víctima, se enamoró del mundo de la fotografía durante su adolescencia, pero nunca lo convirtió en su oficio. La mujer de 44 años ha dedicado su vida al sector sanitario, trabajando más de veinte años en la industria farmacéutica y luego como secretaria médica.
La fotografía se ha convertido en la vía de escape de Julie, que comparte en ocasiones puntuales durante giras artísticas o a través de organizaciones sin ánimo de lucro.
“Soy fotógrafa voluntaria de ‘Au-delà des nuages’, una asociación que apoya a padres en el duelo perinatal. Fotografío a bebés fallecidos con sus padres. Es un trabajo delicado, pero totalmente voluntario”, ha explicado la víctima.
Estafadora de empleo
Julie relaciona la situación que está viviendo actualmente con la pareja de su expareja: “Contactaba con mi familia, mis amigos, mis colegas... Incluso llegó a acosar a mi madre”. En 2018 la situación se agravó y cuando era voluntaria de un partido local, fue acusada por ser “estafadora del desempleo” ante más de 80 personas.
Lo que comenzó con un acoso personal ha desencadenado en una deuda de 120.000 euros. La mujer ha presentado las pruebas y certificados oportunos que desmienten que haya trabajado por cuenta propia, pero lleva más de dos años envuelta en la batalla administrativa.
La Oficina Nacional del Empleo (ONEM) en Bélgica y el Instituto Nacional de Seguro Social para Trabajadores Independientes (INASTI) valoran que hasta 2021, la mujer tomó la fotografía como ocupación secundaria y hasta 2025 como principal empleo.
Ante estas acusaciones, Julie alega que los únicos ingresos que ha recibido de la fotografía son 100 euros en 2022 por un calendario y 80 euros por una foto. “En total, gané unos 180 € a lo largo de varios años... Lo increíble es que la ONEM me exige 28.000 € en cotizaciones y el INASTI 93.000 € de atrasos”.
“Gané 180 euros a los largo de varios años”
Numerosos certificados y pruebas han sido presentados para probar que no ha trabajado por su cuenta. Además, viajó a la sede central de Bruselas con el objetivo de descubrir quién era la persona que había detrás de su de su supuesta alta como autónoma con el asesoramiento de sus abogados.
“Lo percibo como acoso administrativo. Soy honesta y transparente, pero este asunto me hace sentir como si me estuvieran acosando”, ha admitido Julie durante el proceso de investigación.
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“Me temo que esta situación complicará mi futura búsqueda de empleo. Quieren que pague por algo que no tengo. Es agotador, y desde luego no tengo ese dinero”. Julie está buscando un empleo para poder solventar la deuda de la que todavía no ha podido deshacerse.
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