Muere un ciclista de 20 años en un accidente con el coche de sus padres

En la noche del miércoles, Teruel fue el escenario de un trágico accidente. Un joven ciclista de 20 años que transitaba por la carretera TE-6014 colisionó violentamente con un coche. La caída fue fatal. El casco se le rompió causándole heridas irreversibles. No obstante, no murió en el acto. Fue trasladado al hospital Obispo Polanco, donde ha muerto en la madrugada de hoy.

Pero hay una eventualidad que hace este episodio aún más triste. El vehículo con el que impactó el deportista era el de sus padres. El muchacho se encontraba en Teruel para pasar las vacaciones de verano con sus familiares. Había llegado recientemente desde Elche, lugar en el que cursaba sus estudios universitarios -relacionados, precisamente, con el ámbito del deporte-.

Visibilidad reducida

Según el medio local Heraldo de Aragón, el auto podría haber frenado o aminorado la marcha en algún punto de su trayecto, lo que habría provocado el choque con la bicicleta. Los dos ocupantes del coche han resultado físicamente ilesos. El siniestro ha sucedido en un punto cercano a la pedanía de Villaspesa, a apenas seis kilómetros de la capital de la provincia aragonesa.

La Dirección General de Tráfico señaló que el afectado murió alrededor de las 1.45 horas de hoy, jueves -el choque se habría producido alrededor de las 21.45 horas, y los golpes mortales habrían sido sufridos por el joven en la cabeza y el tórax-. Por lo tanto, el deceso aconteció muy poco después de haber llegado al hospital ya en es estado extremadamente crítico.

Una nueva víctima de las carreteras. A menudo, los ciclistas se ven envueltos en este tipo de episodios, por lo que las autoridades lanzan periódicamente campañas de concienciación para que tanto los conductores de los coches como los de las bicis extremen las medidas de precaución en momentos del día o puntos de la calzada en los que haya visibilidad reducida.