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SOCIEDAD

El producto retirado de Mercadona que es top ventas en España

Son los huevos fritos que retiraron del supermercado. En la actualidad, se producen más de 40.000 para las cadenas de comida rápida.

Mercadona sube el sueldo a sus trabajadores.

En 2022 Mercadona, la cadena de supermercados española originaria de Valencia, sembró la polémica al lanzar al mercado un producto muy común envasado: el huevo frito. En aquel momento, la idea levantó una gran diversidad de opiniones en redes sociales, tanto de adeptos como de críticos a este nuevo producto. Los partidarios de él veían una gran comodidad para quienes no tenían tiempo, mientras que los detractores hacían referencia a la gran cantidad de plástico que se invertía en un producto tan sencillo de cocinar.

El ideólogo de este alimento envasado fue Javier Yzuel, fundador de la empresa Innovation Foods 360. Entre los motivos que dio de este invento fue, principalmente, que los tiempos habían cambiado y hoy en día la gente tiene menos tiempo para cocinar. En su momento se vendieron por casi 2 euros y aunque Mercadona ya no los vende, a día de hoy se siguen comercializando millones de unidades cada año en España.

El objetivo de este producto: ahorrar tiempo a sus consumidores

El huevo frito envasado es una alternativa más a la de cualquier plato precocinado: “Quien quiera hacerlo, lo hace. Quienes no tienen tiempo o tienen un imprevisto, tienen una opción prácticamente lista para la venta en los hipermercados”, sentencia Yzuel. En cuanto al hecho de que se emplea una cantidad relativa de plástico para su envasado, el ideólogo recalca que están trabajando para que se vendan en envases con fibras reciclables, aunque los trámites para aprobarlo desde Europa son lentos.

Un producto con una textura difícil de manipular

Uno de los mayores retos de este producto es controlar la textura de este alimento tan característico, pues desde la empresa tienen como objetivo obtener las yemas líquidas y los bordes más tostados, sin llegar a quemar el alimento. La idea es que al consumirlo en los hogares, tras calentarlo unos segundos en el microondas, se alcance una consistencia que sea lo más parecida posible al huevo recién frito en la sartén.

La idea surgió en 1998 y en su momento no fue muy bien recibida. Tras años de pruebas, en 2014 logró patentarla y venderla a Mercadona. Sin embargo, además de esta cadena de supermercados, numerosos restaurantes de comida rápida se interesaron por ella. De hecho, en la actualidad, la fábrica Innovation Foods 360, en Teruel, produce más de 40.000 huevos fritos al día, sin sal, aditivos y conservantes.

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