El motivo por el que las almohadas de la cama se ponen amarillas

Uno de los misterios o incógnitas que nos hacemos de vez en cuando es, ¿Por qué salen manchas de color amarillo en nuestras almohadas? La respuesta es muy sencilla, se debe a un uso continuo y al paso de los días. Es normal que en nuestras almohadas, pasado un tiempo, aparezcan ciertas manchas de color amarillo las cuales significan que ya es el momento de que le des un buen lavado.

No importa el tipo de material con el que esté hecha la almohada, ni su forma, tamaño; los motivos que provocan que salgan estas manchas son el sudor, que se filtra por el tejido, y la saliva, que se cae en ella cuando una persona está durmiendo.

¿Cómo prevenimos que salgan estas manchas?

La única solución que podemos aplicar para evitar la aparición de las manchas amarillas en nuestras almohadas es lavarlas para eliminar la suciedad. Aunque no debemos lavarlas de forma diaria o semanal, sino que lo recomendado es hacerlo alguna vez al año o de forma trimestral.

Para poder limpiar las manchas de forma efectiva debemos seguir las indicaciones que vienen en las etiquetas de las almohadas, como pueden ser la temperatura del lavado, su secado o el tiempo de lavado. De esta forma nos aseguraremos de tener unas almohadas limpias y no veremos esas manchas de color amarillento.

Ropa de Cama

La almohada no es el único elemento de nuestra cama que se puede ensuciar o coger manchas de color amarillo. En las sábanas, edredones, cojines y sus respectivas fundas también pueden aparecer estas manchas repugnantes que intentamos evitar, sobre todo en la ropa de cama de color blanco. Aunque en las almohadas el lavado tiene una periodicidad más larga, el resto de los componentes tiene un tiempo de lavado más frecuente debido a su material.

Si quieres blanquear de forma más eficaz tu ropa de cama de color blanco un truco casero es utilizar quitamanchas. Este truco permitirá que el lavado sea más potente y reduzca la aparición de las manchas.