El histórico documento de la Guardia Civil que cumple 180 años
La cartilla del Guardia Civil, redactada por el duque de Ahumada, nació el 20 de diciembre de 1845 y sigue vivo en el siglo XXI.
El 20 de diciembre de 1845, por Real Orden, el Gobierno español aprobaba la Cartilla del Guardia Civil, redactada por el duque de Ahumada, Francisco Javier Girón y Ezpeleta. Esta norma no fue un simple reglamento operativo: se convirtió en el código moral que ha guiado a la Guardia Civil durante generaciones, marcando un hito en la historia de la seguridad pública en España.
Un cuerpo para un Estado moderno
En la primavera de 1844, bajo el reinado de Isabel II, España afrontaba el reto de modernizar su sistema de seguridad para erradicar la impunidad de bandoleros y malhechores. El duque de Ahumada, designado por el Gobierno de González Bravo, organizó en tiempo récord la Guardia Civil, desplegando en octubre de ese año el primer contingente de 4.679 hombres.
Sin embargo, los reglamentos iniciales eran insuficientes. Faltaba algo más que normas: hacía falta un código ético que definiera la conducta del guardia civil. Ahumada lo entendió y, en el verano de 1845, redactó en su finca gaditana El Rosalejo la Cartilla que marcaría la identidad del Instituto.
El corazón de la Cartilla: Honor y Virtud
La Cartilla se estructuraba en cuatro partes, pero la más trascendente fue el Capítulo I: Prevenciones generales para la obligación del Guardia Civil, con 35 artículos que recogían valores como:
- Honor, la principal divisa del guardia civil.
- Dignidad personal, integridad y honradez.
- Templanza, prudencia, fortaleza y valor.
- Responsabilidad, lealtad y vocación de servicio.
En una época dominada por la “ética del deber” kantiana, la Cartilla recuperó la “ética de las virtudes”, adelantándose a su tiempo. Exigir honor y dignidad a personal de tropa era revolucionario en el siglo XIX.
De la Cartilla al Código de Conducta
La Cartilla se actualizó en 1852 y se mantuvo casi intacta hasta su integración en el Reglamento de 1943. Hoy, 180 años después, sigue siendo referente ético y se proyecta en el Código de Conducta de la Guardia Civil, que consolida esos valores en la normativa contemporánea.
Como señaló la Revista de la Guardia Civil en su repaso por el 175 aniversario, y el artículo en Revista LOGOS sobre el Honor, la Cartilla no es solo historia: es presente y futuro. En tiempos de crisis de valores, su mensaje sigue vigente: “El honor ha de ser la principal divisa del guardia civil”, tal y como escribe el Teniente General Eduardo Martínez Viqueira.
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“El honor, como principal divisa del guardia civil, y junto a él, la dignidad personal, la integridad y honradez, la templanza, la prudencia, la fortaleza, el valor, la responsabilidad personal, la lealtad, la vocación de servicio o la exactitud en el cumplimiento del deber”.
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