NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

SOCIEDAD

El consumo de cloretilo se dispara: los jóvenes lo utilizan como droga

Este anestésico utilizado en el deporte se ha convertido en una tendencia entre los jóvenes, quienes lo inhalan para obtener un breve subidón, pero sus consecuencias pueden ser graves, desde daños neurológicos hasta problemas cardíacos.

El consumo de cloretilo se dispara: los jóvenes lo utilizan como droga

Lo que empezó como un remedio común en botiquines deportivos ha dado un inquietante giro. El cloretilo, un anestésico en spray utilizado para calmar dolores musculares, ha encontrado un nuevo y alarmante público: adolescentes y jóvenes que lo inhalan en busca de un rápido subidón. En parques, fiestas y redes sociales, su uso como droga recreativa está ganando terreno, desatando preocupaciones entre especialistas en salud.

El cloretilo ha pasado de ser un elemento casi exclusivo de los botiquines deportivos a convertirse en la nueva droga de moda entre los jóvenes. El método es sencillo: el espray se rocía sobre un paño o una prenda de ropa y, acto seguido, se inhala profundamente. Los efectos son inmediatos, provocando una breve sensación de euforia y risas, pero también conllevan un lado oscuro. Según explica el Dr. Carlos Morante, médico de urgencias del Hospital de Henares, su uso continuado puede generar graves consecuencias para la salud, desde problemas cardíacos hasta daños en el sistema nervioso central.

El cloruro de etilo, conocido comercialmente como Cloretilo, es de fácil acceso. A pesar de las advertencias de las autoridades, este producto puede adquirirse sin receta en farmacias, parafarmacias y a través de internet, lo que ha facilitado su rápida difusión entre los más jóvenes.

Un consumo preocupante

Los efectos a corto plazo del cloretilo son engañosamente inofensivos: una risa descontrolada, ligera descoordinación y una euforia pasajera. Sin embargo, las consecuencias a largo plazo son más preocupantes. Aparte de los riesgos inmediatos como la pérdida de conciencia y caídas, el consumo frecuente puede generar agresividad, trastornos cardíacos graves y daños irreversibles en el sistema nervioso central.

A pesar de esto, la venta del cloruro de etilo sigue siendo difícil de rastrear. Tanto la AEMPS como la consultora farmacéutica IQVIA manejan datos de distribución, aunque ninguna ha proporcionado cifras claras sobre el número de aerosoles vendidos. Mientras la AEMPS reconoce un aumento en la demanda, desde IQVIA afirman que no han detectado picos de ventas significativos, lo que sugiere que buena parte de la distribución podría estar ocurriendo a través de canales informales, como el mercado negro o vendedores en línea.

Una vieja moda

Aunque el consumo de esta sustancia pueda parecer nuevo, lo cierto es que, si nos remontamos unos cuantos años atrás, el cloretilo ya era una “moda”. “En los años noventa ya era bastante conocido entre los chavales que querían irse de fiesta con una droga fácil y barata, pero “entre el año 2000 y 2010 hubo una época de mucho uso”, comenta el psicofarmacólogo experto en drogas Antón Gómez-Escolar.

Advierte de que el cloruro de etilo no está pensado para ser inhalado y “no tiene una historia de investigación de uso muy rigurosa”, por lo que se desconoce “qué tipo de riesgos entraña realmente un consumo más regular”. Añade que al tener un efecto disociativo y causar descoordinación o incluso desmayos, pueden producirse traumatismos por caída. Recomienda que, de hacer uso de esta sustancia, se haga sentado para minimizar los riesgos.

Sigue el canal de Diario AS en WhatsApp, donde encontrarás todo el deporte en un solo espacio: la actualidad del día, la agenda con la última hora de los eventos deportivos más importantes, las imágenes más destacadas, la opinión de las mejores firmas de AS, reportajes, vídeos, y algo de humor de vez en cuando.

Normas