El cambio radical que la DGT estudia en las matrículas de los coches
El organismo planea una modificación para ampliar las posibilidades de matriculación. Se valora incrementar una letra o un número.
El parque móvil de España está compuesto por más de 33 millones de vehículos, según los últimos datos ofrecidos por Unepsa, la patronal de empresas de seguros. Todos ellos, sea cual sea su estado y antigüedad, tienen una cosa en común: están matriculados. Algo que parece obvio, pero que es un trámite necesario y obligatorio a la hora de comprar un vehículo en nuestro país.
La matrícula, una combinación de letras y números, permite identificarlos de forma individual, asociándola al titular del vehículo. Un sistema que lleva vigente en España más de un siglo, aunque con diferentes cambios. El primer método contaba con un sistema numérico provincial únicamente numérico; tras ello, uno provincial alfanumérico y, el vigente desde el año 2000, con cuatro números y tres letras, ya sin distinguir entre provincias.
Pero pronto este modelo podría dejar paso a otro, toda vez que el actual ritmo de matriculación ‘preocupa’ a la Dirección General de Tráfico, que es el organismo encargado de hacer las combinacines de las matrículas de los coches vendidos en España. Y, como en todo, se buscan cambios que puedan hacer frente a posibles problemas. En este caso, evitar que se acaben las combinaciones alfanuméricas para las matriculaciones de las próximas décadas.
Añadir otra letra u otro número, las opciones
Por el momento, las posibilidades pasan por crear nuevas formas para la identificación obligatoria de todos los vehículos. Y, para ello, se manejan varias opciones. Una de ellas es la inclusión de un quinto número en la matrícula, para así ampliar el abanico de posibilidades. Del mismo modo, se puede optar por añadir una letra más, pasando de tres a cuatro.
Estas opciones ampliarán en un gran número las combinaciones a la hora de fijar las matriculaciones. Pero hay una tercera vía, que es incluir las letras ‘prohibidas’. Unas letras que se vetaron para evitar dar pie a combinaciones que pudieran resultar malsonantes. Se trata de todas las vocales (A, E , I, O, U) y ciertas consonantes (CH, LL, N y Q).
Actualmente, las matrículas en España cumplen con el formato marcado por la Unión Europea, con las conocidas tres letras y cuatro números. Con ellos se pueden dar, aproximadamente, más de 92 millones de combinaciones. Un sistema que, hasta hace no mucho, garantizaba que se podían mantener durante unas dos décadas sin modificación alguna.