Egipto cancela el proyecto para restaurar una de sus pirámides
La pirámide de Micerinos, la menor de las tres que conforman la necrópolis de la meseta de Guiza, no será restaurada tras la revisión realizada por un equipo de expertos.
Egipto renuncia a llevar a cabo su “proyecto del siglo”. El Ministerio de Turismo y Antigüedades del país del Nilo reculó en sus intenciones de restaurar la pirámide de Micerinos, conocida también como Menkaura, la pirámide de menor tamaño de las tres que conforman la necrópolis de la meseta de Guiza.
La decisión llega después del informe emitido por un comité de expertos, que consideró inviable recubrir con bloques de granito la pirámide, un plan anunciado a finales de enero por el secretario general del Consejo Supremo de Antigüedades, Mostafa Waziri. La intención inicial era devolver a la pirámide su aspecto original, aunque el proyecto generó controversia en la comunidad científica desde sus inicios.
El motivo, una posible infracción de las convenciones de la UNESCO respecto a los procesos de restauración de los monumentos considerados como Patrimonio de la Humanidad. El gobierno egipcio contrató al arqueólogo Zahi Hawass, cuya labor examinar la viabilidad de la restauración. El comité consideró que este proyecto podría alterar el estado de la pirámide y, por ello, optaron por preservar su estado actual “sin ninguna adición debido a su excepcional valor arqueológico global”.
Polémica en Egipto por los vídeos difundidos del proyecto
Asimismo, el exministro de Turismo y Antigüedades egipcio explicó en Reuters que las pirámides “son seguras y no les pasará nada”. De este modo, se echa para atrás un proyecto cuya duración iba a ser de tres años en un trabajo considerado como “el regalo de Egipto al mundo en el siglo XXI”.
Además, otra de las razones que explica la controversia generada radica en un vídeo que mostraba la primera fase de la reconstrucción. En el mismo, se puede observar como los operarios colocaban los bloques de granito, cuyo aspecto difiere mucho del que tienen ahora las piedras de la fachada de la pirámide. Un plan que fue criticado días atrás por diversos arqueólogos por el material que se iba a utilizar.
Mansour Brik, por ejemplo, explicó al diario Almsaey que la mayoría de piedras de la pirámide “son viejas” y no están “ni pulidas ni niveladas”. Ibrahem Badr, profesor asociado de restauración y conservación arqueológica, calificó como “grave” la situación. “Alguien necesita leer las convenciones internacionales para la restauración y el tratamiento de las antigüedades egipcias”.