Andalucía, en alerta por una plaga de lagarta peluda
La mariposa Lymantria dispar, cuando todavía es una oruga, amenaza los árboles del Parque Natural de Los Alcornocales de los que se extrae el corcho.
El Parque Natural de Los Alcornocales, situado en la provincia de Cádiz, se encuentra en plena crisis por culpa de la mariposa Lymantria dispar, también conocida como lagarta peluda, un insecto que cuando todavía es oruga se alimenta de brotes y hoja de los árboles de la familia de los alcornoques. En España, es el segundo defoliador más importante en masas forestales, según recoge 20 Minutos.
La concentración de alcornocales en el paisaje humanizado se le conoce como dehesa, y permite la extracción y comercialización del corcho. España produce en torno al 30% del corcho mundial, un negocio que se encuentra en serios problemas debido a una plaga de lagarta peluda en el Parque Natural de Los Alcornocales, que tiene una superficie de 173.619 hectáreas. Según explica el medio citado, este insecto estaría amenazando a más de 45.000 hectáreas de alcornocales.
Ni siquiera las fumigaciones que ha llevado a cabo la Junta de Andalucía con un fitosanitario biológico, el Bacillus Thuringiensis, ha dado resultado. “Es como fumigar como agua. En el año 2000 ocurrió lo mismo, se usó un producto químico y acabó con la oruga, pero está prohibido porque afecta a otras especies”, señala José Manuel Macías, representante de fincas privadas del Parque Natural de Los Alcornocales. Por ello, se han planteado tres posibles soluciones al problema.
Adelantar la saca, prorrogarla o fumigar con Diflubenzurón
En primer lugar, se ha propuesto adelantar la saca de corcho a mayo en lugar de hacerla en junio para anticipar el desarrollo de la oruga, que en este mes todavía se encuentra en estado larvario. La segunda sería la prorrogación de la saca, ya que la sequía y la plaga amenazan a los árboles.
La última de ellas la propone la Junta y pasa por fumigar la zona con otro fitosanitario, el Diflubenzurón, lo que podría “combatir y resolver la grave emergencia ambiental y socioeconómica”. De acuerdo con la Junta, el Diflubenzurón se ha usado “durante 25 años sin que nunca jamás se haya reportado ningún solo problema medioambiental ni para la salud pública”.
“El alcornocal se está secando y el daño ambiental y socioeconómico puede ser irreparable”, aseguró esta semana el consejero Fernández-Pacheco, que cree que “la solución a esta plaga la tiene el Gobierno central”. Sin embargo, los partidos Por Andalucía y el Partido Socialista le aseguraron que las competencias son autonómicas.