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Adiós a los coches eléctricos: Elon Musk busca una alternativa para Tesla

Tesla podría abandonar los vehículos eléctricos en favor del hidrógeno, una tecnología que desafiaría su visión de futuro

FILE PHOTO: A Tesla logo is pictured on a car in the rain in the Manhattan borough of New York City, New York, U.S., May 5, 2021. REUTERS/Carlo Allegri/File Photo
Carlo AllegriREUTERS

La era dorada de los coches eléctricos parece tambalearse. Aunque han sido el eje de la transformación automovilística en la última década, los bajos volúmenes de ventas están llevando a las principales marcas a reconsiderar sus estrategias. Tesla, líder indiscutible del mercado de vehículos eléctricos hasta hace poco, no es inmune a esta crisis a pesar de su magnitud. La compañía, que ha sido superada recientemente por la empresa china BYD en ventas globales de vehículos cero emisiones, enfrenta desafíos técnicos y estratégicos que podrían redefinir su futuro.

El caso del Cybertruck es paradigmático. Aclamado como una revolución en diseño y funcionalidad, el vehículo ha sufrido múltiples problemas técnicos que han retrasado su producción y llevado a retiradas masivas del mercado. A esto se suma la cancelación del esperado Model 2, el eléctrico económico que prometía un precio de 25.000 euros, pero que ahora ha quedado archivado indefinidamente.

Hidrógeno: ¿la nueva apuesta de Tesla?

En medio de estas dificultades, Tesla podría estar preparando un cambio radical. Según informaciones surgidas en las últimas semanas, la compañía estaría explorando el desarrollo de vehículos impulsados por hidrógeno. Aunque Elon Musk ha rechazado públicamente esta tecnología en el pasado, la presión por innovar y las limitaciones actuales de los vehículos eléctricos han llevado a especulaciones sobre un giro estratégico.

El hidrógeno ofrece ventajas notables frente a los eléctricos tradicionales, como mayor autonomía y un repostaje significativamente más rápido. Sin embargo, sus desventajas no son menores: el almacenamiento sigue siendo costoso y la infraestructura de abastecimiento es insuficiente en muchos países.

A pesar de ello, gigantes como Toyota ya están apostando por esta tecnología, lo que podría motivar a Tesla a no quedarse atrás.

Un futuro incierto

Tesla aún no ha confirmado oficialmente sus planes en relación con el hidrógeno, pero el creciente interés en esta tecnología ha puesto a la industria automovilística en alerta.

Si la compañía de Musk decide apostar por el hidrógeno, podría alterar drásticamente el rumbo de la movilidad sostenible. El desafío está servido: encontrar una alternativa viable y competitiva a los coches eléctricos podría ser la clave para el futuro de Tesla y el sector automotriz en general.

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